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Plaza se endeuda en 113 millones y debe vender aún un tercio del suelo para pagar a los bancos

El consejero de Obras Públicas confía en comercializar todo en cinco años, aunque admite dificultades por la crisis. Seis operaciones, que suman 10,6 millones, se han roto.

La Plataforma Logística de Zaragoza (Plaza) se ha endeudado en algo más de 113 millones de euros para poder refinanciar su deuda y afrontar la urbanización de los últimos suelos. Así lo aseguró ayer el consejero de Obras Públicas, Alfonso Vicente, quien se mostró convencido de poder devolver todo el dinero a los bancos en el plazo acordado, cinco años. Para ello, se deberá vender todas las parcelas disponibles, que suman a estas alturas el 26% del suelo urbanizado para usos industriales y comerciales.

En su comparecencia en las Cortes de Aragón, Vicente reconoció las dificultades para vender los terrenos con la actual crisis, que ha provocado incluso que seis operaciones comprometidas, por un importe de 10,6 millones, se hayan roto. Las firmas habían firmado la compra de casi 46.000 metros.

También apuntó que cinco empresas debían haber estrenado sus naves en 2009 y han pedido una moratoria hasta 2011 o 2012, aunque las parcelas están pagadas al 100%. Y otros nueve compradores han requerido un aplazamiento de los pagos comprometidos, que ascienden a 16 millones.

No obstante, Plaza negocia una gran operación que afecta a más de 100.000 metros cuadrados. "El resto son naves que se van vendiendo por goteo", explicó.

El consejero incidió en que al cierre del ejercicio 2009 se había desembolsado el 80% de los costes de Plaza, mientras que los ingresos por ventas suponían el 60% del total previsto. En este sentido, detalló que los suelos pendientes de enajenación supondrían 268 de los 684 millones de euros previstos, mientras que los gastos suman 612. Así, dijo que Plaza estaría en condiciones de devolver el capital a los socios (42 millones aportados por la DGA, el Ayuntamiento, Ibercaja y CAI) e incluso repartir otros 30 si llegara a venderse todas las parcelas al precio estimado.

Los partidos mostraron su apoyo al proyecto, aunque con puntualizaciones. El diputado de CHA Bizén Fuster, que había solicitado la comparecencia de Vicente, evidenció que la crisis ha golpeado más de lo previsto a la marcha de Plaza. También mostró su sorpresa por la decisión de reemplazar al consejero delegado por una comisión ejecutiva, "típica de una empresa familiar".

Ricardo Berdié (PSOE) y Miguel Ferrer (PAR) destacaron la solidez de Plaza, la generación de empleo y su capacidad de atracción de financiación externa.

El más crítico fue el popular Antonio Torres, quien pidió más información sobre las garantías del crédito y consideró, pese a las explicaciones, que había "oscurantismo" en lo que concierne a la Plataforma Logística.