La deuda que acumula la plataforma logística Plaza y que ha obligado a la sociedad que la gestiona a endeudarse en más de cien millones procede principalmente de impagos y operaciones fallidas. En cifras, según fuentes del Gobierno de Aragón, esta deuda -de unos 50 millones de euros- se traduce en nueve empresas que han solicitado un aplazamiento y en tres que han optado por desvincularse. Además, esta cantidad podría incrementarse si finalmente Plaza acepta la anulación de otros tres contratos con sendas compañías.

En superficie supone que hay unos 45.000 metros cuadrados por los que la sociedad ha dejado de ingresar una cantidad importante, puesto que las empresas adjudicatarias pidieron posponer su pago en diciembre de 2008. Las causas residen fundamentalmente en las dificultades para obtener financiación de los bancos por la crisis económica. Pero mientras en este caso Plaza tiene posibilidades de ingresar dinero, no ocurre lo mismo con tres empresas cuya compra ha resultado fallida. De esta forma, quedan 20.000 metros cuadrados de la plataforma logística desiertos. Fuentes de la DGA no quisieron detallar cuánto supone económicamente cada uno de estos contratiempos.

Retrasos en la construcción

Desde el Ejecutivo económico explicaron que, además de demoras en los pagos, también se han solicitado moratorias de cons- trucción. En concreto, hay cinco empresas que compraron suelo en 2006 y debían construir en 2009, pero han pedido un aplazamientos de dos o tres años. No obstante, ya han abonado el cien por cien del precio de venta.

A todo esto hay que añadir que la plataforma logística (12,8 millones de metros cuadrados) todavía no ha logrado vender entre un 20% y un 30% de su superficie, según explicó el pasado miércoles el consejero de Economía y Hacienda de la DGA, Alberto Larraz. Entonces, Larraz aseguró que cuando se logre vender el suelo que falta se cerrará Plaza "bien" y se solventará la deuda que existe.

La sociedad que gestiona la plataforma zaragozana, integrada por la DGA, el Ayuntamiento de Zaragoza, Ibercaja y CAI, se ha visto considerablemente afectada por la crisis inmobiliaria. No en vano, su principal fuente de ingresos es la venta de suelo. Con los créditos solicitados, además de refinanciar su deuda de 50 millones de euros, pretende afrontar nuevos proyectos por los que también podría ingresar más dinero. Entre otros, la urbanización de los nuevos desarrollos, entre los que se incluye la parcela de Decathlon.

Pero antes, Plaza deberá concluir con éxito las negociaciones que mantiene con varios bancos para hacer frente a su delicada situación financiera y pasar este 2010 sin sobresaltos económicos. Larraz aseguró que la plataforma "no corre peligro".