Autovía del Pirineo

Navarra pide a Fomento agilizar la A-21 en Aragón

La presidenta navarra inauguró los 2 últimos tramos en la comunidad foral y solicitó acelerar las obras en Aragón, "ralentizadas muchos años".

La presidenta del Gobierno de Navarra, Yolanda Barcina, ha inaugurado los dos últimos tramos navarros de la Autovía del Pirineo (A-21), que, con una longitud de 16,6 kilómetros, han supuesto una inversión de 271 millones de euros


Los dos tramos inaugurados unen la Venta de Judas con Yesa y Yesa con el límite entre Navarra y la provincia de Zaragoza. En Aragón el Ministerio de Fomento tiene pendiente todavía la culminación de esta infraestructura. En la parte aragonesa solo hay 8,3 kilómetros abiertos en medio de un total de 57,5 con obras inacabadas o ni siquiera iniciadas.


De ahí que, en su discurso, Barcina se haya lamentado de que "no hay manera de salir de Navarra por autovía salvo nuestras conexiones con el País Vasco" y haya solicitado al Gobierno de España que "acelere algo que ha estado ralentizado muchos años".


Los 16,6 kilómetros inaugurados este jueves, que estaban incluidos en el Plan Navarra 2012 y en cuya construcción han participado alrededor de 650 trabajadores, de los que el 80 % eran navarros, han sido financiados a través de la fórmula de "peaje en la sombra" por la empresa Autovía del Pirineo, S.A.


En total, la Autovía del Pirineo a su paso por Navarra tiene una longitud de 46 kilómetros y ha conllevado una inversión total de más de 370 millones de euros.


Barcina, quien estaba acompañada del consejero de Fomento y Vivienda, Anai Astiz, y del presidente del Consejo de Administración de Autovía del Pirineo, S.A., Jesús Rodríguez, ha destacado en su intervención que con estos dos últimos tramos "se culmina un período histórico en las carreteras de Navarra".


Al respecto ha subrayado que se trata de los últimos kilómetros de las vías de gran capacidad que se han construido en la Comunidad Foral a lo largo de los últimos 40 años.


La presidenta ha remarcado que, sin embargo, ni la Autovía del Camino, ni la Autovía del Ebro, ni esta del Pirineo tienen continuidad más allá de las fronteras de la Comunidad Foral.


"Los navarros, con nuestro esfuerzo y con nuestros ingresos, hemos construido estas autovías que no son solo para nosotros sino para el conjunto de los españoles, por eso pedimos que haya reciprocidad", ha subrayado Barcina.