Solo una hora después del cierre de las urnas, a las 19.00, en el salón de actos de Matemáticas, Manuel López se deshacía en abrazos con sus compañeros de equipo. El escrutinio había terminado y daba a este catedrático de Bioquímica y Biología Molecular una amplia victoria. Con el 60,77% de los votos ponderados, se convertía en el nuevo rector de la Universidad de Zaragoza. Su contrincante, Rafael Navarro, obtuvo el 39,23%.

López se ganó el favor de todos los sectores, sobre todo el del personal de administración y servicios, que le dio más del doble de sufragios que al otro candidato: 662 frente a 281. Lo mismo sucedió con los estudiantes, le votaron 2.081, mientras que Navarro recibió 912 papeletas. Los profesores respaldaron también al representante de la coalición Colectivo-Renovación. De hecho, acumuló 1.117 votos de los doctores con vinculación permanente a la Universidad, que es el sector con más peso, ya que su voto supone el 53% del total. Entre estos docentes, el otro aspirante tuvo 657.

Por centros, López ganó en cantidad de papeletas en la mayoría de las grandes facultades: Filosofía y Letras, Ciencias, Medicina, Derecho o Veterinaria, y tuvo apoyos también en los campus de Huesca y Teruel. Navarro, en cambio contó con el respaldo del Centro Politécnico Superior y Ciencias Económicas y Empresariales.

De haberse contabilizado simplemente el número de papeletas (sin ponderación), la diferencia entre los dos candidatos hubiera sido de 1.826 papeletas: 3.846 para López y 2.020 para Navarro.

Nada más conocer los resultados y arropado por los aplausos, Manuel López dio las gracias a su equipo de colaboradores, que siguieron el escrutinio en una pantalla gigante del edificio de Matemáticas. "El trabajo ha dado sus frutos", afirmó el rector electo poco antes de que sus compañeros comenzaran a descorchar el champán.

Cerca de allí, en el aula magna de la Facultad de Derecho, los colaboradores de Rafael Navarro seguían también la jornada electoral. Con los resultados en la mano, se desplazaron a una cafetería próxima al campus. Allí, el candidato del grupo Plataforma Abierta aseguró que todavía no había analizado a fondo los datos de los comicios, pero reconoció que la derrota podía haberse debido a "un fallo en la estrategia". "López optó por los estudiantes y nosotros apostamos por una campaña más dirigida los profesores. Estos nos han fallado. Quizá el mensaje no ha llegado tanto como pensábamos a la comunidad universitaria", argumentó el catedrático del Departamento de Ciencia y Tecnología de Materiales y Fluidos. "Esperaba unos resultados más ajustados, pero como se dice en mi pueblo: jugar y perder, pagar y callar", añadió.

Poca participación

Un año más, la escasa participación de los estudiantes marcó las elecciones. Solo votaron el 9,98% de los alumnos (3.264 de los 32.716 del censo). En cuanto a los docentes, los que más acudieron a las urnas fueron los doctores con vinculación permanente a la Universidad (lo hizo el 79,63%). El porcentaje de participación del personal de administración y servicios fue del 60,52.