ESTACIÓN DE AUTOBUSES

Los transportistas amenazan con dejar las líneas de autobuses deficitarias

Los empresarios hablan de una crisis "insostenible" en el sector tras constatar unas pérdidas del 20% de viajeros

El 20% de pérdida de viajeros de autobús que las empresas de transporte han registrado en el último año ha llevado al sector a una situación "insostenible". Por ello, urgen medidas administrativas para mantener "el único transporte que vertebra el territorio". De no ser así, algunas se plantean el abandono de las líneas regulares deficitarias, por lo que dejarían sin servicio a muchas localidades que forman parte de las 43 rutas que no son rentables.


Las líneas aragonesas transportaban en 2005 a cerca de 6 millones de pasajeros y ahora están en torno a los 4,5 millones. Con los datos sobre la mesa, miembros de la asociación sectorial, que se reunieron ayer en la estación central de autobuses de Zaragoza, describieron su situación. Según explicaron tanto Juan Calvo, presidente de la estación y de Ágreda Automóvil, como Juan Francisco Jiménez, vicepresidente de la agrupación empresarial, hasta ahora la administración jugaba con que las empresas dedicaran los beneficios de las líneas rentables para mantener las deficitarias. "Pero esos vasos comunicantes ya se han acabado porque ahora qué línea es rentable", se preguntan. De hecho, apuntan que el Gobierno de Aragón solo subvenciona el 40% del coste las rutas deficitarias.


Solo la subida del gasóleo y las nuevas exigencias de la normativa en materia laboral suponen entre el 65 y 70% del coste por kilómetro. "Tenemos muy poco margen de maniobra", apuntan. Son causas que han provocado una crisis del sector en todo el Estado. Pero además han acusado el traslado a la estación intermodal, del que ayer se cumplió un año. En este sentido, apuestan por que con el mismo billete se permita tomar un autobús urbano hasta el centro y facilitar las paradas intermedias. La línea de Huesca, que cuenta con esta posibilidad, transportaba a más de 800.000, y ha perdido entre 15% y 20%. Es la ruta que más viajeros transporta.


Carlos Belda, director gerente de Automóviles Bajo Aragón, indica que su empresa tiene líneas con un 0,5% de ocupación en las que en 100 kilómetros de recorrido se suben 3 pasajeros. Como ejemplo, señala que ya tuvo que suprimir el servicio entre Montalbán y Alcañiz, que recibió muchas protestas en la zona, porque no transportaba a nadie.


La dirección general de Transportes subvenciona a 30 empresas que cubren las más de 40 líneas llamadas de débil tráfico. En 2007, la línea de ayudas estuvo dotada con 1.500.000, según fuentes del Gobierno de Aragón. Además, hay una serie de contratos-programa para cubrir necesidades asistenciales porque unen poblaciones que dan servicio a un hospital comarcal como la ruta de Caspe al Hospital de Alcañiz o la de Binéfar al de Barbastro, con paradas en Azanuy, Fonz y Estadilla. Además, el Gobierno de Aragón también subvenciona líneas establecidas por comarcas y ayuntamientos.


Por otro lado, frente al 7,9% de incremento del IPC del transporte, las tarifas en las líneas de Aragón han subido un 5,3% desde el 1 de abril y en las nacionales, un 2,79%. "Pero, en realidad, la subida de las tarifas no nos sirve de nada porque retrae la demanda, y lo que necesitamos son viajeros", asegura Juan Calvo. En este sentido, todos los representantes de las empresas como Therpasa o Alosa coincidieron en la necesidad de arbitrar medidas para hacer más atractivo el servicio.


Por su parte, Juan Francisco Jiménez insistió en que podrían mejorar los servicios si contaran con la misma subvención que los trenes. Aunque todos aseguran que no quieren entrar en guerra con el ferrocarril, "se está priorizando un modo de transporte sobre el otro. Si no hubiera tren, habría más autobuses, pero sin autobuses, el territorio quedaría incomunicado", afirma de acuerdo con el resto de los empresarios.