CAMBIO DE CONTRATA EN EL PIGNATELLI

Los funcionarios ya no beben Ambar

Un cambio de contrata ha provocado que el Pignatelli deje de servir una de las marcas aragonesas más reconocibles, la cerveza Ambar.

La cafetería se encuentra en uno de los sótanos del Pignatelli.
Los funcionarios ya no beben Ambar
HERALDO

En la sede del Gobierno de Aragón se avecinan tiempos de cambios que exceden lo político y darán que hablar, sobre todo, en las barras de bar. La cafetería del edificio Pignatelli estrena contrata y desde ayer funciona bajo el mando de la compañía andaluza Areco Servicios Integrales S. L., que ha sustituido los grifos de Ambar por otros de una marca no aragonesa. Salvo que haya modificaciones, los funcionarios dejarán de tomar cañas de la Comunidad durante al menos los dos años que dura el contrato.


Los responsables de La Zaragozana se han puesto en contacto con el Ejecutivo autonómico para advertirles del cambio y -según aseguraron los empresarios cerveceros- les comunicaron que harían una recomendación a la contrata de la cafetería. De momento, no tienen constancia de que esta se ha producido. Por su parte, desde el Gobierno de Aragón señalaron que no han recibido ninguna queja oficial de usuarios del servicio hostelero.


La decisión de Areco -con sede en Sevilla- de optar por productos no aragoneses cumple la normativa. Al parecer, responde a una política que sigue la compañía a nivel nacional por la que suministra determinadas marcas en los servicios hosteleros que gestiona. Este periódico intentó ayer sin éxito ponerse en contacto con Areco.


«Nos preocupa que ahora sea la cerveza, pero después pueda ocurrir lo mismo con el agua, el aceite, el vino... que se dejen de servir productos aragoneses en un sitio tan representativo», explicaron desde La Zaragozana. Esta compañía ha sido la adjudicataria de la cafetería-restaurante del Pignatelli durante los últimos años.


Ahora, Areco se ha hecho con el servicio por un importe final de cerca de 126.000 euros (IVA excluido) y un contrato de dos años. Su oferta ha sido considerada la más ventajosa por delante de las presentadas por las empresas Clece S. A. y Alessa catering services, según consta en la orden del Departamento de Presidencia por la que se adjudica el contrato de servicio de la cafetería del Pignatelli.


En ese documento se establecen también los precios de los productos que se sirven en ese establecimiento y que continúan siendo de los más asequibles de la ciudad. Un cortado tendrá un coste (IVA excluido) de 0,65 euros, un bollo 0,74, una caña 0,65 y un refresco de cola 0,83.


En la lista de los lugares más baratos, a la cafetería de la sede de la DGA se unen la de las Cortes, los hospitales públicos y las que están repartidas por los campus universitarios. Ejemplos de que, aunque escondidos, en Zaragoza todavía hay lugares para desayunar con poco más de un euro.