UNIVERSIDAD

Los estudiantes podrán acabar la carrera aunque tengan una asignatura suspendida

La Universidad de Zaragoza ultima un reglamento de exámenes que incluye una evaluación por compensación en la que no solo cuenta la nota de la materia, sino todo el expediente.

Los más de 31.000 estudiantes de la Universidad de Zaragoza podrán terminar la carrera con una asignatura obligatoria o troncal -es decir, básica- suspendida si tiene una buena trayectoria académica. El Rectorado ultima un nuevo reglamento de evaluación que permitirá a los alumnos superar el último curso mediante un sistema de compensación en el que no solo cuenta la nota obtenida en la materia suspensa, sino la valoración global y conjunta del expediente del estudiante. El borrador de la nueva normativa -la vigente data de finales de los 80- se debatirá en breve en consejo de gobierno y se aplicará de inmediato.


La Universidad busca con este modelo -ya implantado en instituciones como la Politécnica de Madrid- reconocer el esfuerzo que el alumno ha hecho durante la carrera y valorar si está capacitado para acceder a un empleo relacionado con su profesión. Esto no quiere decir que superen el curso todos los que lo soliciten. Solo podrán hacerlo aquellos que tengan todo aprobado salvo una materia, que hayan cursado al menos la mitad de la carrera en uno de los campus públicos de Aragón y que se haya presentado al menos dos veces al examen para superar la asignatura que les queda, entre otros criterios.


Si cumple estos requisitos, una comisión calculará si el expediente del alumno le permite compensar el suspenso. Lo hará mediante una fórmula en la que se tienen en cuenta dos notas. La primera (nota A) es la media ponderada de las asignaturas obligatorias y troncales de toda la carrera. La segunda (nota B), la media aritmética de todas las convocatorias en las que el alumno se ha presentado a la materia que tiene pendiente.


La nota A vale un 70% y la B, un 30% (estos porcentajes varían según los créditos de la asignatura suspendida, ver explicación en el cuadro de la derecha). Ambas se suman y si el resultado es igual o mayor que 5, se le da la calificación de apto. No obstante, en el expediente quedará reflejado que el alumno suspendió el examen en concreto, pero que se le concedió el título por compensación curricular, según el borrador del nuevo reglamento al que ha tenido acceso este periódico.


El sistema de compensación es un paso más hacia el modelo de evaluación continua en el que el examen deja de ser el medidor principal para dar peso a los informes, trabajos, seminarios y otros ejercicios desarrollados durante el curso. Así lo exige la adaptación al Espacio Europeo de Educación Superior, que evalúa el aprendizaje, las competencias, y no solo el conocimiento. "Se debe superar el tradicional examen como única prueba para la calificación. Este cambio podrá realizarse a través de procedimientos de evaluación que no se articulen en forma de pruebas", dice el borrador del nuevo reglamento.


Se vigilarán las materias 'hueso'

La normativa no servirá exclusivamente para regular, sino también para prevenir que se repitan algunos de los problemas que los universitarios acarrean desde hace años. Uno de ellos es el de las asignaturas con un alto índice de suspensos o las que generan más dificultades a los estudiantes, por diferentes casuísticas. Se pretende detectar cuáles son esas materias, analizar las causas por las que cuentan con un elevado fracaso en los exámenes y tomar medidas correctoras si se considera oportuno.


En concreto, se actuará ante las asignaturas que en los últimos tres años tengan una tasa de suspensos superior al 60% o que el curso anterior no hayan aprobado más del 35% de los matriculados. Pero también se revisarán aquellas en las que la tasa de éxito supere el 95% y tengan menos de dos puntos de diferencia entre la calificación más alta y la más baja.


El encargado de controlar estas materias será el coordinador de cada titulación. Habrá, además, una comisión de garantía de calidad que se ocupe de esto. Según los informes que los observadores elaboren se decidirá si se cambian contenidos de la asignatura, se modifican las pruebas de evaluación o se toman otras medidas.