Los alcaldes del Valle del Aragón han decidido crear una comisión para mediar entre la empresa Etuksa, que explota la estación de Candanchú, y el grupo Aramón, a fin de intentar recomponer las negociaciones entre ambas sociedades tras la ruptura del proceso de integración.

El acuerdo se ha adoptado en una reunión celebrada en el Ayuntamiento de Jaca, en la que han participado los alcaldes de esta localidad, Aísa, Canfranc, Borau, Villanúa y Castiello, así como el presidente de la comarca de la Jacetania, Alfredo Terrén, y el diputado provincial Luis Gutiérrez.

A su término, el alcalde de Jaca, Enrique Villarroya, ha explicado en rueda de prensa que se ha creado un grupo institucional de cuatro personas, para recabar "la información más exacta y clara" posible sobre la situación de las negociaciones entre Aramón y Candanchú, y estudiar "cómo podemos, desde el territorio, mejorar el futuro de las estaciones y, en especial, de Candanchú".

El grupo está compuesto por José Luis Galindo, alcalde de Aísa, -población a la que pertenece la estación de Candanchú-; Fernando Sánchez, de Canfranc; Enrique Villarroya, de Jaca, que actuará como portavoz, y el presidente de la comarca de la Jacetania, Alfredo Terrén.

Villarroya ha destacado el interés de los alcaldes en transmitir a la sociedad "tranquilidad y seguridad" y en disipar "las alarmas", porque la nieve de las estaciones de Candanchú y Astún, que no están integradas en Aramón, "seguirá siendo motor de la actividad económica del valle y referente del mismo".

Etuksa y Aramón son dos empresas y los alcaldes "no pueden inmiscuirse en las mismas", pero sí "ayudar a decisiones que se tomen entre ambas partes para que la economía mejore", ha añadido.

Para ello, uno de los primeros pasos del grupo será mantener sendos encuentros tanto con Etuksa, como con el presidente de Aramón, Francisco Bono, además de con el tejido económico, social y empresarial del territorio.

"Queremos, desde el territorio, ayudar a solucionar los conflictos que puedan surgir", ha subrayado Villarroya, quien ha afirmado que la comisión trabajará "con prudencia y transparencia" para "que haya un acuerdo".

Villarroya, que solicitará a ambas empresas "información que ellas tienen y nosotros no", ha destacado la importancia de "trabajar en una sola dirección", con el objetivo de "seguir manteniendo la actividad económica que tiene la nieve en este territorio".

Las reuniones las pretenden mantener "en un plazo breve de tiempo", que será anunciado, y se llevarán a cabo "tantas como sean necesarias", y será el Gobierno de Aragón "el primero en conocer las posturas adoptadas".

El también alcalde de Jaca afirmó que no le consta "que no haya existido acuerdo" entre Candanchú y Aramón, ni que "no se siga trabajando en la búsqueda de una solución".

Tras considerar que existen "muchas posibilidades", ha apostado por lograr "el acuerdo más favorable para que el desarrollo de la estación de Candanchú sea normalizado".

El Consejo de Administración de Aramón anunció la semana pasada que, tras realizar una auditoría, era "inviable" la integración de Candanchú en el grupo empresarial semipúblico, ya que existen contingencias "de diversa índole" que "imposibilitan continuar el proceso" y "hacen inviable dicha operación".

Desde la estación de Candanchú, expresaron su perplejidad por el anuncio de ruptura de las conversaciones porque "contradice" el proceso de negociaciones llevadas a cabo hasta la fecha desde 2007.

En el seno de la Asociación de Turística del Valle del Aragón (ATVA), compuesta por administraciones públicas y empresas, también causó preocupación, ya que consideran que la zona "no se puede quedar atrás frente a las estaciones de Formigal y Panticosa, en el vecino valle de Tena, que forman parte del "holding" aragonés de la nieve.