Las víctimas claman contra la sentencia

Después de casi nueve años de pleitos hemos aprendido mucho…y ya nos hemos hecho unos expertos en los archivos del juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska sobre el caso del Yak-42 …


Después de casi 9 años a la sociedad española ya no tenemos que decirles que seguimos peleando por la verdad del terrible accidente aéreo en el que murieron 62 padres, hijos, hermanos, maridos, amigos…62 militares que regresaban de cumplir una misión en el nombre de España.


Hoy la noticia es que Marlaska ha vuelto a archivar… por tercera vez…


En las dos anteriores, en 2004 y 2008, recurrimos y la sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ordenó al Juez Grande-Marlaska que se reabriera la investigación. Esta vez volveremos a recurrir.


Y ahora ¿por qué un nuevo archivo? .


El pasado 11 de enero el juez Grande Marlaska dio un ultimátum a la fiscalía. Le pedía que en un plazo de 4 días informara de si la investigación sobre la contratación del Yak-42 debía ir a juicio, o por el contario, debía ser archivada.


El 13 de febrero la Fiscalía de la Audiencia Nacional contestó. Pedía al juez Fernando Grande-Marlaska que finalizara la investigación para juzgar a los seis militares imputados por la contratación del avión Yak-42. El teniente fiscal, Fernando Burgos, sostenía en su escrito varias razones:


1. "La absoluta falta de diligencia" de los "responsables militares competentes" puede poseer "relevancia penal indudable como imprudencia grave en la producción del siniestro


2. Una "concurrencia de indicios que definen la culpa o imprudencia grave generadora de responsabilidad penal en relación con las 62 muertes producidas", lo que se concretaría en otros tantos delitos de homicidio por imprudencia grave.


3. Que al contratar el vuelo se produjo "una conducta omisiva de los más elementales deberes objetivos de cuidado en el ejercicio de estas funciones", y ello a pesar de que los responsables militares tenían "conocimiento de las enormes deficiencias e irregularidades que caracterizaban los vuelos de esta clase que se ejecutaron en los meses anteriores con aviones de fabricación rusa".


4. Lo que, argumentaba el Ministerio Fiscal, “nos conduce a sostener que hubiera sido evitable".


Hoy, dos de febrero, el Juez Grande Marlaska responde al Ministerio Fiscal y explica por qué archiva:


1. El juez no aprecia delito en las numerosas irregularidades que rodearon la contratación del Yak-42, que se estrelló el 26 de mayo de 2003 en Trabzon (Turquía) con 62 militares que regresaban de Afganistán.


2. Según el juez, el accidente es atribuible a “la falta de preparación concreta de la tripulación para aterrizar en un aeropuerto como el de Trabzon” o para reaccionar “ante situaciones de riesgo”, así como a la “razonable fatiga” después de tantas horas de vuelo.


3. En su opinión, “no fueron las circunstancias relativas al estado y mantenimiento de la aeronave las causas directas o indirectas del siniestro”.


4. En consecuencia, el juez aprecia la “ausencia de responsabilidad penalmente relevante” en los seis mandos militares imputados (el entonces jefe del Estado Mayor de la Defensa, almirante general Antonio Moreno Barberá; el jefe del Estado Mayor Conjunto, teniente general Juan Luis Ibarreta; el jefe de la División de Operaciones, contralmirante José Antonio Martínez Sainz-Rozas; el enlace con la agencia NAMSA de la OTAN, coronel Abraham Ruiz López; el ex jefe de la Sección Logística, coronel Joaquín Yáñez Delgado; y el teniente coronel Alfonso Elías Lorenzo Taboada, subordinado del anterior), de quienes dice que no les era “exigible una acción concreta omitida intencional o imprudente en relación con el vuelo”.


Las familias recurriremos…y esperamos que el Ministerio Fiscal también lo haga.


Sabemos que hubo fallos de seguridad, mal funcionamiento y mal mantenimiento de las aeronaves ucranianas contratadas a través de la agencia de la OTAN Namsa. Sabemos que el despegue del Yak-42 fue ilegal, que las quejas sobre el estado de la aeronave llegaron con mucho tiempo de antelación al Ministerio de Defensa que podría haber evitado que el vuelo despegara si hubiera tenido en cuenta las deficientes y lamentables condiciones en las que lo hacía…


Antes conseguimos demostrar en la Audiencia Nacional la falsificación de la identidad de 30 de los 62 fallecidos. El tribunal condenó en mayo de 2009 a tres años de prisión al general Carlos Navarro y a un año y medio de cárcel a los oficiales médicos José Ramírez y Miguel Sáez.


Ahora seguiremos luchando por demostrar que el Yak- 42 no debió de despegar nunca…


Desde la Asociación de familias víctimas del Yak-42 entendemos que pueda haber “cierta urgencia en cerrar este asunto”…Al exministro de Defensa, Federico Trillo, parece que le espera un nuevo destino…Nada menos que la embajada de Washington… El señor Trillo no es diplomático pero el gobierno le podría conceder esta distinción destinada a “personas extraordinarias en circunstancias extraordinarias”…Un insulto como comprenderán para todos nosotros y nuestros muertos…Por los que el ex ministro de defensa tan mal veló…A los que el ex ministro de Defensa nunca considero “personas extraordinarias en circunstancias extraordinarias”…no tuvieron la posibilidad de un forense español…declaró en la causa por escrito…y nunca, jamás, nos pidió perdón.