POR DEBAJO DE LA MEDIA ESPAÑOLA

Las mujeres ocupan solo el 13% de las cátedras de la Universidad de Zaragoza

La directora del Observatorio de Igualdad de Género dice que la mujer ha ido ganando más representación dentro de la institución académica, aunque todavía queda mucho por hacer, ya que sigue existiendo una diferencia entre sexos a la hora de acceder a determinados puestos.

Las mujeres ocupan sólo el 13% del total de las cátedras de la Universidad de Zaragoza, dos puntos por debajo de la media española, que se sitúa en un 15,1 por ciento, unos datos que indican que hay que continuar trabajando para conseguir la igualdad de oportunidades.


Así lo ha afirmado ha los medios de comunicación la directora del Observatorio de Igualdad de Género, María Villaroya, en la celebración del 25 aniversario de las 'I Jornadas Mujer y Universidad' que se celebraron en la institución académica en 1985.


Esta iniciativa surgió del colectivo feminista Lisístrata, compuesto por un grupo de jóvenes universitarias, con el objetivo de reivindicar una mayor presencia de la mujer en la Universidad, en un momento en el que no ocupaba ningún puesto relevante.


"En esos años, no había decanas, ni vicerrectoras, ni directoras de departamentos", ha señalado Villaroya, quien ha añadido que en los cinco años de historia no ha habido ninguna rectora al frente de la Universidad de Zaragoza.


Veinticinco años después, la mujer ha ido ganando más representación dentro de la institución académica, aunque todavía queda mucho por hacer, ya que sigue existiendo una diferencia entre sexos a la hora de acceder a determinados puestos, ha manifestado.


Por ahora, las mujeres representan el 13 por ciento del total de las catedráticas de la Universidad de Zaragoza, dos puntos por debajo de la media nacional (15,1 por ciento), y ocupan menos del 30 por ciento de las cargos de dirección de los distintos departamentos.


Estos datos reflejan que la promoción de la carrera profesional dentro de la Universidad de Zaragoza no es la misma para hombres y mujeres, aunque en la teoría se defienda el principio de igualdad de oportunidades, ha precisado Villaroya.


"La realidad es que en la práctica hay muchos factores que influyen. Por ejemplo, hasta hace poco para acceder a las cátedras tenías que aprobar un examen nacional que corregía un tribunal de hombres", ha comentado.


Por otro lado, la entonces representante del colectivo Lisístrata, Delia Requibatiz, organizador de estas primeras jornadas, ha explicado que la iniciativa surgió ante la poca o nula presencia que tenía la mujer en los estudios universitarios en el año 1985.


"Se ignoraba el trabajo de las mujeres en los distintos estamentos de la ciencia. En Historia, Biología o Física no se hablaba de las mujeres", ha apuntado Requibatiz, quien ha reconocido que después de estos años el panorama ha cambiado, ya que ahora se han incorporado másters sobre estudios de géneros.