Las dudas surgen en Ontiñena a la espera de cobrar otro 4% por las tierras

Los propietarios de 300 hectáreas más, que iban a firman en junio, aún aguardan la cita

Las dudas de que el proyecto de Gran Scala salga adelante han vuelto a surgir entre los vecinos de Ontiñena. Desde que se firmó la opción de compra sobre unas mil hectáreas de particulares el pasado 10 de febrero, ha pasado demasiado tiempo para los propietarios de la localidad del Bajo Cinca que esperan firman los contratos de compraventa. Muchos expresan entre líneas su excepticismo y la mayoría no se atreven a opinar demasiado. Su respuesta es: vamos a esperar a octubre.

 

Quien no tiene dudas es el alcalde de Ontiñena, Ángel Torres, que asegura que los promotores de ILD le han confirmado su intención de continuar con el macrocomplejo. "El proyecto no está parado, se está trabajando, pero lo que pasa es que no hay noticias importantes", aseguró el alcalde. "Lo que está claro es que ellos tienen que estar seguros de que el Gobierno de Aragón no va a rechazar su proyecto", argumenta para explicar el retraso.

 

No obstante, admite que muchos propietarios que ya firmaron en febrero le preguntan porque están inquietos por saber si se sigue adelante con el complejo de ocio y juego. Algunos, aunque solo sea, para saber si pueden sembrar las tierras o si se resolverá de forma inmediata y perderán la cosecha.

 

El primer edil también confirmó que no hay cita para pagar el 4% del precio de los terrenos antes del 10 de octubre. Es la fecha en la que vence el contrato que suscribieron con la opción de compra, según el cual si a los ocho meses de la firma no se producía la compraventa, se abonaría otro cuatro 4%. En el caso de que ILD abandonara el proyecto, los propietarios se quedarían con sus tierras y esa cantidad que recibieron en febrero. El portavoz de ILD solo aseguró que sería pocos días antes, aunque "la intención es que sea un acto privado".

En este tiempo, también ha contribuido a sembrar la duda el hecho de que no se llegara a firmar la opción de compra sobre otras 300 hectáreas de particulares que el 10 de febrero o no se habían decidido a vender o no tenían la documentación en regla. Aunque en principio se anunció que sería en junio, se fue retrasando y ahora tampoco tiene fecha.

 

Por su parte, el portavoz de ILD, asegura que "el único problema es que la gente no tiene sus papeles listos, y no podemos ir para firmar diez hectáreas cada vez". De todos modos, comentó que si antes del 10 de octubre se puede firmar, que podría producirse al mismo tiempo que ese 4% que les toca abonar a los primeros vendedores si quieren continuar.

Esta cantidad es necesaria para conseguir el número de hectáreas que ocupará Gran Scala. Ahora, hablan de 3.015, para lo que necesitan, según la Ley de Centro de Ocio de Alta Capacidad, tener un 90% asegurado. No obstante, el portavoz de ILD explica que no hay problema porque ya hay un compromiso del Ayuntamiento de Ontiñena de vender las 1.300 hectáreas municipales, lo que les sirve de garantía a la hora de presentar el proyecto.

ILD en las fiestas de Ontiñena

No obstante, la participación de representantes del socio español de ILD, Riera & Carreras, en las recientes fiestas patronales de Ontineña, que se celebraron el 3 al 8 de septiembre, contribuyeron a disipar las dudas. No solo lo resaltó el alcalde Angel Torres, que considera que si no hubieran estado interesados no acudirían al pueblo, sino también el presidente de la comarca del Bajo Cinca, Evaristo Cabistañ. No obstante, aunque asegura que no tiene dudas, antes de pronunciarse también quiere esperar a ver qué pasa en octubre.

 

Y por supuesto, fue un detalle que no pasaron por alto los vecinos del pueblo que, con este gesto, recuperaron la confianza en el proyecto. Ángel Costa, vecino del municipio y propietario de parte de los terrenos sobre los que se levantará el complejo de ocio, se muestra optimista ya que "se están dando los pasos correctos y se camina en la buena dirección", explica. En este sentido, Costa confía en que "la opción de compra se efectuará en octubre, las escrituras también y el proyecto, aunque lentamente, verá pronto la luz". Otros propietarios, como Manuel Cregenzán, parecen tener más dudas. "La crisis y las vacaciones han paralizado bastante el proceso", comenta. Aun así, este vecino de Ontiñena no pierde la ilusión, ya que de salir adelante, "el proyecto supondría todo un revulsivo para el pueblo", matizó. Otros siempre se han manifestado en contra.