Las Cortes exigen que la UE busque una solución comunitaria a la crisis de Opel

Las Cortes de Aragón exigieron a la Unión Europea (UE) que busque una solución comunitaria a la crisis de Opel. Los cinco Grupos Parlamentarios de las Cortes autónomas aprobaron una propuesta de resolución de apoyo a los trabajadores de Opel España en el Debate de Política General que dio inicio al curso político en Aragón.

Aunque todos los Grupos Parlamentarios habían registrado sendas propuestas de resolución sobre la crisis de la empresa del automóvil, a lo largo de la mañana el presidente de las Cortes, Francisco Pina, autorizó un largo receso de una hora de duración, aproximadamente, durante el cual los Grupos consensuaron un texto único que recoge la opinión colectiva de la clase política aragonesa y que será trasladada al Gobierno de España.

La iniciativa consta de tres puntos, uno de los cuales emplaza al Gobierno autónomo del socialista Marcelino Iglesias a dirigirse al Gobierno de España para que medie ante la UE, de tal manera que esta coordine una posición única de todos los países comunitarios afectados por la venta del 55 por ciento de las acciones que General Motors Corporation (GMC) tiene en Opel a la multionacional de la industria de componentes Magna.

Expresamente, el Parlamento aragonés exige a la UE que evite "la preponderancia de cualquiera" de los países de la Unión "a la hora de negociar aspectos que afectan al empleo", en clara alusión a la presidenta del Gobierno federal alemán, la conservadora Angela Merkel, que aportó meses atrás 1.500 millones de euros en créditos para que Opel siguiera pagando a sus trabajadores y proveedores, después de lo cual consiguió que las plantas que Opel tiene en Alemania salgan beneficiadas del resultado final de la negociación.

Asimismo, el Pleno del Parlamento autónomo urge al Gobierno de Aragón a trabajar junto con el Ejecutivo de España para poner en valor ante los nuevos propietarios de Opel, los accionistas de la multionacional de la industria de componentes Magna, los "aspectos socioeconómicos" que "justifican plenamente" el futuro industrial de la planta que Opel tienen en la localidad zaragozana de Figueruelas y sus empresas auxiliares, diseminadas a lo largo de la comarca zaragozana de Ribera Alta del Ebro y otros puntos de la provincia.

Además, las Cortes de Aragón solicitan al Ejecutivo central que elabore un plan de choque "especial" para la mejora de la competitividad y el desarrollo del sector del automóvil en Aragón. La iniciativa se aprobó por unanimidad.

En las primeras horas de la sesión parlamentaria de hoy, y antes de que los cinco Grupos Parlamentarios alcanzaran el acuerdo definitivo, PSOE y PAR defendieron su iniciativa conjunta, mientras que los Grupos de la oposición, PP, IU y CHA defendieron sendas propuestas de resolución sobre Opel.

El portavoz del PP, Eloy Suárez, exigió la adopción de planes de choque para afrontar la posible pérdida de 1.700 puestos de trabajo en Figueruelas, en la línea de su partido de buscar soluciones para recolocar a los empleados que se vean forzados a abandonar la planta. El diputado de IU, Adolfo Barrena, incidió en cómo la crisis de Opel se trasladará a las empresas auxiliares, afectando por lo tanto a muchos más trabajadores de lo que reconoce Magna.

El portavoz económico de Chunta Aragonesista (CHA) alertó de las "expectativas" negativas a las que se enfrenta la plantilla de Opel y aprovechó para criticar la "pasividad" de los Gobiernos central y aragonés en la gestión de esta crisis, en comparación con otros Ejecutivos, en alusión al caso alemán.

El regionalista Javier Allué (PAR) aplaudió el éxito de la "riada" de ciudadanos aragoneses que el sábado pasado, 18 de septiembre, participaron en la manifestación de apoyo a los trabajadores de Opel. El socialista Carlos Tomás confió en el futuro y afirmó que, precisamente, "lo peor" que puede ocurrir es que se modifique la tendencia positiva de la Comunidad Autónoma.