La Policía tiene sus informes "avanzados" y prevé la imputación de nuevos delitos

La Policía trabaja a buen ritmo, pero la ingente cantidad de información por analizar le impide correr más. Eso es lo que le ha dicho al juez que investiga la presunta trama de corrupción urbanística de La Muela, en un escrito en el que le adelanta que los últimos informes de la Operación Molinos están "avanzados" y del que se deduce que podrían imputarse nuevos delitos.

El pasado 5 de marzo, y por segunda vez desde que empezó a instruirse el caso, el magistrado se dirigió al Grupo de Blanqueo de Capitales para interesarse por sus pesquisas. El titular del Juzgado de Instrucción número 1 de La Almunia, Alfredo Lajusticia, quería saber cuándo tienen previsto remitirle sus nuevos informes. Sin embargo, como hicieran hace unos meses, los investigadores han vuelto a decirle que "resulta difícil prever una fecha determinada para la conclusión de los informes". "Una vez acabados -le precisan-, se remitirán a ese juzgado a la mayor brevedad posible".

La Policía explica al juez que siguen practicándose "intensas gestiones y pesquisas" en relación con los hechos investigados. El Grupo de Blanqueo de Capitales matiza además que dichas averiguaciones tienen como finalidad "la consecución de todas las pruebas e indicios que permitan corroborar los hechos imputados en los diferentes informes que hasta la fecha han sido remitidos a ese juzgado; así como poner de manifiesto otros hechos constitutivos de presuntos ilícitos penales".

La Brigada Provincial de Policía Judicial ha citado durante los últimos meses a varios testigos. Y en su escrito, le recuerda al juez instructor que todavía "se va a requerir" a más "a fin de que aporten datos concretos necesarios para completar algunos aspectos de la investigación".

Por lo tanto, parece bastante probable que los próximos informes policiales que reciba el juez acarreen la imputación de nuevos delitos. Lo que todavía es imposible saber es si estos hechos delictivos recaerán sobre las 36 personas ya investigadas en la Operación Molinos, o si por el contrario supondrán la inclusión de algún nuevo nombre en la larga lista de imputados.

Volcado informático

Durante los últimos meses, los funcionarios del Grupo de Blanqueo de Capitales han tenido que estudiar con lupa toda la documentación intervenida en los 18 registros domiciliarios practicados el 18 de marzo de 2009, cuando se destapó la presunta trama de corrupción urbanística de La Muela y se llevaron a cabo las detenciones. De hecho, mientras un centenar de agentes desembarcabas en el municipio, la Unidad de Delitos Económicos y Fiscales (UDEF) intervenía también en Zaragoza capital, Nuez de Ebro, Cadrete, Cuarte, el municipio oscense de Alerre, las localidades madrileñas de San Sebastián de los Reyes y Alcobendas, y en San Javier, Murcia. Toda la información obtenida entonces, ha sido escaneada para su posterior análisis.

La Brigada de Investigación Tecnológica también ha procedido al volcado de todos los discos duros de los ordenadores intervenidos. Los agentes también vaciaron la información de las computadoras del Ayuntamiento de La Muela y de la sede de Aranade, empresa que gestionaba el Urbanismo del municipio.

El Grupo de Blanqueo de Capitales también ha tenido que estudiar toda la documentación aportada por 34 entidades bancarias, con las que los imputados trabajaban. "Debido al enorme volumen de documentación objeto de estudio y la minuciosidad con la que se está intentando plasmar el los informes cada uno de los ilícitos penales", resulta difícil cuando se podrán entregar los informes, insisten.