La DPZ acusa a la DGA de presionar para ampliar la subestación eléctrica de Terrer

La apuesta de la DGA por ampliar la subestación eléctrica de Terrer para solventar con mayor rapidez la falta de suministro que condiciona el futuro de un buen puñado de proyectos en todo el corredor de la Autovía Mudéjar ha derivado en un enfrentamiento político con responsables políticos de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ). Mientras el Gobierno aragonés insiste en las afecciones negativas por esta carencia de infraestructura eléctrica, el vicepresidente segundo de la DPZ, Juan Antonio Sánchez Queró, acusa a la consejería de Industria y a Endesa de "presionar" al municipio para que "incumpla la ley" y "vaya contra sus vecinos".

Los polígonos industriales de Santa Eulalia del Campo, Sarrión y Calamocha; la Plataforma Industrial y Logística de Teruel (Platea) y hasta la electrificación de la línea de velocidad alta entre Zaragoza y la capital turolenses. Estos son algunos de los grandes proyectos del corredor de la Autovía Mudéjar que, según el Ejecutivo autonómico, podrían tener su futuro en el aire, además de afectar a otros municipios como Ricla, Calatorao, Épila y La Almunia.

Ante la alerta por la paralización que puede sufrir el desarrollo del suroeste de Aragón, tal como publicó HERALDO, Juan Antonio Sánchez Quero calificó ayer en una nota de prensa de "inadmisible" que la Consejería se alinee de esta forma "con una compañía para presionar a un ayuntamiento que ha manifestado su oposición al proyecto porque, precisamente, incumple la normativa".

La trayectoria de esta subestación de 400 kilovoltios ha sido problemática desde el principio. Fue construida por la Red Eléctrica de España (REE) hace ocho años para alimentar el AVE Madrid-Barcelona. Aunque aparecía ubicada a 500 metros del núcleo urbano, se levantó a apenas cien metros de la urbanización de la Azucarera.

Ante las críticas lanzadas por el vicepresidente segundo de la DPZ, fuentes del departamento de Industria contestaron que no existe ninguna intención de "presionar" al Consistorio de Terrer, y que prueba de ello es que no se ha autorizado su instalación.

La opción

Estas mismas fuentes aclararon que la ampliación de la subestación de Terrer no ha sido descartada por el Ministerio e insistieron en que la planificación nacional contemplaba su construcción para 2008. Asimismo, especificaron que como otra alternativa, para 2013, figura Calamocha, aunque hay intención de reducir este plazo en la medida de lo posible.

"El emplazamiento en la provincia turolense, técnica y económicamente resulta muy complicado -reconocieron desde la DGA-, además de que la solución se retrasa en el tiempo". Si la ampliación de la subestación de Terrer conlleva una línea de 5 kilómetros, la opción de Calamocha precisa de dos subestaciones y dos líneas entre Fuendetodos y Mezquita (de 400 kilovoltios) y entre Mezquita y Calamocha (de 200).

A pesar de estas aclaraciones, el vicepresidente segundo de la DPZ insistió en que en una reunión mantenida en enero con el subdirector de Planificación Energética del Ministerio de Industria, Francisco Mació, la opción de Terrer se dio por desechada en un informe. Además él mismo planteó dos posibles puntos de conexión en la Comunidad de Calatayud situados en un radio de diez kilómetros de Terrer, que prefirió no desvelar para evitar especulaciones.

La comarca Comunidad de Calatayud es una de las que se han visto más afectadas por la insuficiente infraestructura eléctrica. Es el caso de Campillo de Aragón, donde hace unos ocho años la empresa Ibereólica intentó poner en marcha un proyecto de energía eólica. La misma firma se interesó por Munébrega, donde llegó a instalar una torre de medición. Pero esto también ocurrió hace unos años y ahora el alcalde, José Félix Lajusticia (PAR), duda de que el proyecto llegue a buen puerto.