GRAN SCALA

La DGA reconoce "desencuentros" con Gran Scala por el retraso en los terrenos

Los promotores iban a constituir ayer en Zaragoza la sociedad gestora del proyecto, pero la firma no se produjo.

El Ejecutivo aragonés reconoció ayer que empiezan a existir "desencuentros" con los promotores de Gran Scala por el retraso en la compra de terrenos. Representantes del Gobierno aragonés y los máximos responsables de International Leisure Development (ILD) se vieron ayer las caras de nuevo en Zaragoza.


Estaba previsto que el consorcio promotor constituyera ayer mismo la sociedad gestora, que habrá de encargarse del funcionamiento ordinario del proyecto (alquiler de oficinas, contratación de personal...etc), pero la firma ante notario finalmente no se produjo, lo que provocó malestar en la Administración. De hecho, esta esperaba poder haber avanzado más ayer en la definición de los terrenos y de la inversión, así como gestos más decididos por parte de los impulsores del complejo.


Ninguno de los miembros del consorcio quiso responder a estas afirmaciones del Ejecutivo, pero fuentes próximas al mismo explicaron que "el proceso lleva su tiempo". La firma no se llevó a cabo, según dijeron, por problemas de agenda y aseguraron que se producirá "de inmediato" y con un capital "superior al mínimo exigido por la ley".


No obstante, insistieron en que la sociedad que habrá de adquirir los suelos, en primera instancia mediante una opción de compra, no será esa, sino una inversora que no se formalizará hasta que no se decida la estructura fiscal más conveniente de acuerdo con los estudios que se están elaborando.


Las mismas fuentes negaron que se hubieran producido desencuentros importantes con los responsables del Ejecutivo, si bien reconocieron "alguna pequeña discrepancia de opinión".


Antes de encontrarse con los representantes del Ejecutivo, los promotores se habían reunido por la mañana con sus abogados para valorar las distintas fórmulas posibles para llevar a cabo la operación de compra de terrenos, así como la constitución de la futura sociedad inversora. Además, se desplazaron hasta los Monegros con motivo de un reportaje televisivo y aprovecharon para conocer de primera mano las fincas que el Ayuntamiento de La Almolda está intentando reunir para dar cabida a la futura ciudad de ocio y juego.


Sébastien Tranchant, uno de los tres directores generales de International Leisure Development (ILD), pudo conocer sobre el terreno las fincas. "Están bien comunicadas, muy cerca de la autopista y del AVE, y además se trata de una zona plana, que no presenta graves problemas para la construcción", consideró. No obstante, el directivo quiso dejar claro que ésa es "solo una de las cuatro posibles ubicaciones" y que todo está aún abierto.


Aunque el emplazamiento les convence, en ILD están preocupados por la posibilidad de que algunos propietarios de los ochenta que acumulan el suelo no tenga registradas sus fincas. De ser así, se temen, el proceso para regularizarlas podría demorarse unos meses y dar al traste con las previsiones.


Frente a estos riesgos, otra opción como la de Villanueva de Sijena, presenta ventajas, según diversas fuentes de ILD, ya que la propiedad está concentrada en solo tres o cuatro propietarios. No obstante, desde el consorcio insisten en que "no hay preferencias" y que "en cuanto se presente una oferta real cuajada, completa, con escrituras y a un precio razonable, se cerrará la operación".


Pese al importante retraso que acumula la adquisición de terrenos, que tenía que haberse cerrado en enero según las primeras previsiones, Tranchant mantiene el plazo de empezar los primeros trabajos "antes de finales de año". "Nuestro objetivo es septiembre u octubre", afirmó, "pero puede haber un desfase de uno o dos meses".