La crisis no acaba con las vacaciones, pero la playa se impone a los destinos exóticos

Mucha costa española y poco destino exótico. Ese es el plan de miles de familias aragonesas para el mes de agosto. La crisis aprieta tanto como el calor, y los destinos pasan a ser, en muchos casos, algo secundario. Lo principal es ceñirse al presupuesto y elegir ajustándose al mismo, aunque este año haya que ir menos días a la playa y optar por un hotel más modesto.

Además, las contrataciones por internet -sobre todo en el caso de los vuelos- aumentan, debido a que los turistas quieren lograr los mejores precios. Y comienza a hacerse normal que el cliente se haga con unos billetes desde casa y acuda al profesional de la agencia para el resto de servicios.

A pesar de todo, las agencias de viajes matizan que no se puede generalizar (los viajes de novios o las escapadas de parejas con presupuesto, por ejemplo, no se ven afectadas), pero, en general, llega el momento de apretarse el cinturón.

Ofertas de última hora

"A la hora de salir al extranjero se están vendiendo muy bien destinos que no superan los 600 euros por persona", explica Jesús Rojas, de Viajes Primera Línea. Dos de los destinos 'estrella' este verano dentro de este presupuesto son Túnez o Marrakech. "Hace unos días salió una oferta para el 2 y el 9 de agosto, con avión desde Zaragoza y destino Túnez. Son 542 euros por persona en hotel de 4 estrellas y media pensión. Vamos, que está fenomenal", reconoce Rojas.

También se mantienen los cruceros con todo incluido u otros tours. Por ejemplo, este año se han reducido las reservas para zonas como Costa Rica o Perú. Sin embargo, el típico 'pack' que tiene como destino El Caribe, que no pasa de los 1.200 euros por persona, se mantiene.

No obstante, en el caso de las familias, el destino estrella es la costa. "La gente viene con su presupuesto y se amolda. Buscan sitio de playa, sol y pocos gastos. Te piden que sean entre 5 y 10 días y ya está", añaden desde otra agencia.

Javier Ariza, vicepresidente de la Asociación de Agencias de Viajes de Aragón, se muestra, no obstante, prudente. "No se puede generalizar", asegura. "La gente no deja de irse de vacaciones, eso es así. Tal y como están los tiempos ajustan los días o el nivel del hotel, es verdad, pero se van".

"Además, en agosto se van las familias, y siempre ha sido época de mucha playa. Por esto y por la crisis flojean las largas distancias, pero también lo hacen por otros motivos. Por ejemplo, los conflictos en Tailandia han diezmado el turismo en esta zona", añade.

De hecho, todos coinciden en que los destinos son cíclicos. Hace un par de años hubo un 'boom' a la zona de Costa Rica, pero es obvio que, al año siguiente, los turistas querrán conocer zonas diferentes.

Competencia en el ordenador

No obstante, internet está ahí y, en determinados servicios, puede ofrecer ahorros considerables, sobre todo si se buscan con tiempo y en temporada media. Los responsables de las agencias de viajes no ocultan que la red de redes afecta a su volumen de negocio, pero consideran que aún causa cierto recelo entre los potenciales clientes.

"Hay muchas personas que recurren a la red para cotejar y ver por cuánto les saldría el viaje si lo contratasen así, aunque luego no dan el paso porque no se fían", asegura Rojas. Además, recomiendan a quienes recurran a la opción web que no olviden contratar seguros, que pueden encarecer algo el viaje, pero que son necesarios.

La oferta de vuelos desde Zaragoza, también con compañías de bajo coste, es uno de los principales revulsivos para los turistas, que se han acostumbrado a volar a algunos destinos por precios que no superan los 20 euros por trayecto.

Mauricio Prieto, jefe de márquetin de una compañía que opera en internet, eDreams, asegura que los precios que ofrecen, mucho más económicos, están propiciando un trasvase de clientes. En este portal, solo en marzo, llegaron a registrarse 3.265.000 usuarios.