MEDIO AMBIENTE

La base del helicóptero antiincendios de Calamocha, inoperativa en pleno verano

Hace año y medio que el Gobierno de Aragón anunció la puesta en marcha de la instalación pero aún no está lista y la aeronave permanece en la sede de la brigada de Daroca. El trayecto entre ambas ciudades incrementa el tiempo de intervención entre 8 y 10 minutos.

La base de helicópteros de Calamocha no está acabada en estas fechas, en las que la probabilidad de incendios es alta y conforme transcurre el verano aumenta de forma exponencial. Aunque el departamento de Medio Ambiente de la DGA anunció en enero de 2009 que se iba a crear, a fecha de hoy no existe. Fuentes del Departamento señalaron el pasado viernes que la instalación "estará lista en menos de 10 días".

En la campaña antiincendios de 2009, el Gobierno de Aragón informó de que con la creación de la base en Calamocha, habría ocho cuadrillas helitransportadas en la Comunidad. Sin embargo, un año y medio después, el helicóptero que controla la zona de Calamocha está obligado a ubicarse en Daroca, por ser la base más cercana. Concretamente, la que alberga a la Brigada de Refuerzo contra Incendios Forestales (BRIF) del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino.

Esto supone que cuando surge alguna emergencia, el aparato debe despegar de Daroca y dirigirse a Calamocha para recoger a la cuadrilla, lo que le cuesta entre ocho y diez minutos, como mínimo. Esto es la mitad del tiempo que el consejero de Medio Ambiente del Ejecutivo aragonés, Alfredo Boné, dijo que emplean actualmente los servicios forestales para llegar a un incendio.

Por lo tanto, cuando el retén de Calamocha tiene que entrar en acción, tarda entre ocho y diez minutos más que el resto de las cuadrillas de Aragón y merma la rapidez necesaria en este tipo de intervenciones.

Una base problemática

En la Campaña de Prevención y Lucha Contra los Incendios Forestales de 2009, que se comenzó el 1 de enero, el Gobierno de Aragón anunció la puesta en marcha de la nueva base helitransportada en Calamocha. Esta debería haberse instalado en un antiguo aeródromo abandonado del Ejército del Aire. Sin embargo, la continua presencia de buitres en esa zona -de la que alertaron los pilotos que trabajan en los helicópteros sanitarios del 112- hizo que se decidiera cambiar de lugar.

Estos pilotos sobrevolaron la zona para evaluarla previamente de forma oficiosa, y no se llegó a efectuar la oficial de Aviación Civil. Ante estos inconvenientes, el Gobierno de Aragón decidió buscar, también en Calamocha, otro terreno para la base.

Ahora, con el índice de peligro de incendio más alto, las máquinas han comenzado los trabajos para llevar a cabo la explanación de la ubicación definitiva de las instalaciones. Mientras tanto, la cuadrilla forestal utiliza como lugar de encuentro el garaje del camión de incendios, edificio que carece de agua y suministro eléctrico.

Más de mil hectáreas quemadas

Aragón ha sufrido este año 232 incendios forestales en lo que va de año, en los que se han quemado 1.050 hectáreas, en un verano con predicciones meteorológicas más favorables que en 2009, cuando ardieron 22.000 hectáreas.

De los 232 incendios registrados, 164 se han quedado en conatos, al no superar una hectárea, gracias a una rápida intervención, y otros 56 quemaron entre una y cinco hectáreas.