CASO DEL YAK-42

La Audiencia Nacional paraliza el ingreso en prisión del capitán Sáez

La Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha paralizado la ejecución de la condena de un año y medio de prisión que impuso al capitán Miguel Ángel Sáez García como cómplice de la falsificación de la identidad de 30 de los 62 militares que fallecieron en el accidente del Yak-42 mientras se tramita su petición de indulto.


El tribunal ha adoptado esta decisión después de que el pasado martes suspendiera el ingreso en prisión del general Vicente Navarro, que fue condenado a tres años de cárcel por estos mismos hechos, al constatar que sufre una "enfermedad grave e incurable, que se encuentra en fase terminal y que necesita cuidados paliativos".


En el caso del capitán Sáez, los magistrados Javier Gómez Bermúdez, Manuela Fernández de Prado y Nicolás Poveda justifican la suspensión de la ejecución de la pena impuesta por las "circunstancias de todo tipo" que le rodean, el tipo de delito por el que fue condenado y la duración de la condena a ejecutar, que no supera los dos años.


Para ello, aplican el artículo 4.4 del Código Penal, que establece que, "si mediara petición de indulto, y el juez o tribunal hubiere apreciado en resolución fundada que por el cumplimiento de la pena puede resultar vulnerado el derecho a un proceso sin dilaciones indebidas, suspenderá la ejecución de la misma en tanto no se resuelva sobre la petición formulada".


De esta forma, el tribunal, que cuenta con el aval del teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Fernando Burgos, acuerda la suspensión del cumplimiento de la sentencia ejecutoria "mientras se tramita el presente expediente y hasta que recaiga la decisión correspondiente sobre dicha petición".


La Audiencia Nacional condenó el 19 de mayo de 2009 al general Navarro a tres años de prisión por un delito de falsedad en documento oficial. De igual modo, le impuso el pago de una multa de 1.800 euros y una indemnización de 10.000 euros para cada una de las familias de los fallecidos en concepto de responsabilidad civil.


También consideró cómplices de este delito al capitán Miguel Ángel Sáez y al comandante José Ramírez, sobre cuya petición para detener la ejecución de la sentencia aún no se ha pronunciado el tribunal. A ambos les impuso las penas de un año y medio de cárcel y el abono de una multa de 900 euros.


La defensa del general Navarro, de 69 años de edad, dirigió un escrito al tribunal para que suspendiera la ejecución de su condena después de que el pasado 17 de marzo adquiriera firmeza, al ser confirmada en todos sus extremos por el Tribunal Supremo, que constató la "mendacidad" y "lo aleatorio" de las identificaciones.


El accidente del Yak-42 se produjo el 26 de mayo de 2003 en Trabzon (Turquía) y es la mayor catástrofe que han sufrido las Fuerzas Armadas españolas en tiempos de paz.