El presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, ha asegurado, en el pleno de las Cortes, que la estabilidad de la coalición PSOE-PAR que sustenta su gobierno está garantizada "por lo menos" hasta las próximas elecciones autonómicas, que serán a mitad de 2011, y a partir de ahí ambos partidos "serán libres".

Así lo ha dicho Iglesias al responder en la sesión de control del pleno a una pregunta del diputado de IU, Adolfo Barrena, sobre si el presidente puede asegurar la estabilidad de su Gobierno para todo lo que resta de legislatura, al entender que en el seno de la coalición se producen últimamente "discrepancias continuas".

Iglesias, tras considerar que lo que Barrena le pedía era "un acto de fe" y que era algo así como preguntar a una pareja "cuántos años van a seguir juntos", ha afirmado que él hará "lo posible" por que esa estabilidad "se mantenga".

En todo caso, ha incidido en que en la coalición PSOE-PAR los dos partidos tienen "plena libertad para actuar y elegir", una vez cumplidos los compromisos adquiridos, que tienen un límite temporal de cuatro años (una legislatura) y que se plasman en un documento con cien compromisos de Gobierno.

Iglesias ha añadido que "nunca" especulará sobre una "futura legislatura" y que su única responsabilidad ahora es terminar ésta "bien" y, por ello, mientras acaba, va a intentar mantener la estabilidad, objetivo que, según ha dicho, también lo es de su socio de Gobierno.

Ha reconocido, no obstante, que entre dos partidos que "mantienen su personalidad" pueden surgir "dificultades", pero eso "entra dentro del orden de las cosas" y una coalición "no es más sana cuando no tiene dificultades, sino cuando puede resolverlas", algo que el PSOE y el PAR han demostrado que saben hacer durante los diez años en los que han estado gobernando juntos Aragón.

Sin embargo, para Barrena "cada día está más claro" que el Gobierno de Aragón "no es un gobierno", sino una suma de dos partidos, algo que estima "legítimo" siempre y cuando se cumplan los compromisos adquiridos.

Además, ha llamado la atención sobre lo que considera "una situación de interinidad", puesto que se anunciaron cambios en el seno del Ejecutivo antes del verano y aún no se sabe "cuáles y cuándo" se van a producir.

Iglesias también ha respondido a otras cuestiones como la que le ha planteado la presidenta de CHA, Nieves Ibeas, sobre la "responsabilidad política e institucional" que tiene el presidente sobre el hecho de que la Comisión Bilateral de Cooperación Aragón-Estado esté "incumpliendo las previsiones políticas y estatutarias" y en que su trayectoria esté siendo "tan infructuosa" en lo que a resultados se refiere.

El presidente ha anunciado que la presidencia aragonesa de la Comisión (rotatoria anualmente entre el Gobierno aragonés y el del Estado) está a punto de convocar la reunión de la comisión, que se anuló el pasado 19 de octubre, con la finalidad de cerrar "algunos flecos" pendientes.

En ella, ha añadido, habrá "importantes avances", toda vez que las cuatro subcomisiones que se crearon al amparo de este órgano no han parado de trabajar para perfilar avances importantes en tres asuntos: política hidráulica, la unidad de la Policía Nacional adscrita a Aragón y la deuda tributaria.

No es necesaria, ha insistido, una "reunión diaria" de esta Comisión, pero Ibeas ha hecho hincapié en su poca efectividad, puesto que desde que se constituyó no se ha desbloqueado ningún tema importante relacionado con las comunicaciones y las infraestructuras, por ejemplo.

Esto se debe, a juicio de Ibeas, a que Iglesias, a quien ha llamado "barón socialista", no tiene "peso político" para dar contenido a esta Comisión que debería de servir "para resolver conflictos y dirimir controversias", algo que "no se ha hecho".