Huesca

Árboles que destrozan aceras

Las vías de barrios como La Encarnación o Santo Domingo de Huesca se encuentran dañadas por el crecimiento de las raíces de ejemplares ya ancianos.

Aceras de la avenida de Martínez Velasco
Árboles que destrozan aceras
J. S.

Los años pasan y la naturaleza reclama su espacio. Las raíces de los árboles más ancianos de la capital altoaragonesa se están expandiendo hasta hacer saltar las aceras bajo las cuales fueron plantados en su día. La avenida de Martínez de Velasco o Travesía Ballesteros son algunos ejemplos en los que se muestra quien es, hasta el momento, más fuerte. “Sucede, en Huesca, en muchos sitios. Las raíces son muy fuertes y están levantando las aceras. Puede que se trate de árboles inapropiados para el casco urbano o muy viejos”, señala Sara Mairal, portavoz de la asociación de vecinos del barrio de La Encarnación, al que pertenece la parte de la avenida de Martínez de Velasco afectada. “Esto presenta una dificultad, tanto para las personas que salen a pasear y pueden tropezar, como para los niños que van en bicicleta”, añade Mairal.


Los pinos de las zonas verdes frente a los bloques que encuentran entre el antiguo paso a nivel y el hospital San Jorge o los chopos que custodian el antiguo trazado de la vía del tren, en la calle de Ingeniero Susín, son así otros de estos ejemplos. En esta última vía, además, como recuerda Mairal, el Ayuntamiento se encargó de talar cinco ejemplares, dado el peligro que presentaban las ramas en días de mucho viento. Las raíces, sin embargo, permanecen. “Esperemos que puedan quitarlas también, pronto, ya que este año se va a instalar en esa zona la carpa para celebrar la fiestas”, recuerda la portavoz vecinal.Fiestas de la Encarnación

Las celebraciones en honor a la Virgen de La Encarnación darán comienzo, de esta forma, el próximo 6 de marzo. Antes, la carpa y una pequeña feria de atracciones se instalaban en la zona verde de los números pares de Martínez de Velasco más próxima al hospital San Jorge. Sin embargo, como explica Mairal, se ha optado por este nuevo emplazamiento, dado que, como le han transmitido desde el consistorio oscense, permite a los feriantes instalarse guardando las distancias de seguridad adecuadas entre una atracción y otra.


Por otra parte, el presidente de la asociación vecinal Juan de Lanuza (barrio de Santo Domingo), ha denunciado también cómo las acacias están destrozando la acera próxima a las zonas verdes. El paseante puede observar, de esta forma, cómo parte de las raíces han emergido a la superficie para convertirse en un obstáculo. “El bordillo que protege a estos árboles es muy pequeño y sabemos que ha habido incluso tropezones”, señalaba el portavoz de la asociación vecinal.

Cada árbol cuenta

Para Chesus Ferrer, portavoz de Ecologistas en Acción en la capital altoaragonesa, este fenómeno responde a una “mala planificación” en su momento, a la hora de instalar estas especies arbóreas en el casco urbano. “Antes se plantaban árboles como plataneros o chopos con un crecimiento de raíz muy fuerte capaces de levantar la acera perfectamente”, comenta Ferrer. Esta política, asegura, “ha cambiado en los últimos cinco años, en los que el Ayuntamiento ha optado por otras especies”. Desde su colectivo, asegura, apuestan por su mantenimiento siempre que sea posible, si bien hace una distinción entre aquellos ejemplares que son ya “un emblema para la ciudad” y aquellos otros que, sin serlo “están causando unas molestias considerables”. “Cada actuación que se realiza en Huesca influye en el arbolado. Ahora, por ejemplo, tras la construcción de la nueva rotonda de Ramón y Cajal han desaparecido los árboles que había sobre la antigua”, subraya Ferrer.