‘El curso de los recortes’ está a punto de comenzar con menos profesores y maestros y también menos aulas. A todo ello se suma además la situación en la que se encuentran aquellos interinos que habiendo obtenido una plaza lejos de sus hogares, deben hacer frente a gastos como el alquiler de una vivienda o el desplazamiento, con un sueldo de media jornada o menor. ¿Una solución?: La solicitud de un subsidio de desempleo proporcional a las horas en las que permanecen inactivos, con el fin de poder completar un salario con el que llegar a fin de mes. Según explican desde las organizaciones sindicales, son así numerosas las consultas que han recibido estos días para hacer uso de esta ayuda.

“Voy a contar un caso real”, relata Antonio Pérez, portavoz de la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras en Huesca, “un profesor tiene que desplazarse desde Huesca a Fraga cuatro días por semana para cubrir una plaza a media jornada. Si tiene que ir y volver y cobra 800 o 900 euros al mes, ¿Cuánto le queda para vivir? Necesita el paro para completar su sueldo. O tiene, por ejemplo, que trasladarse hasta Teruel y alquilar un piso”. Se trata así, como señala Pérez, de una realidad que se desconoce, en su opinión, “por falta de información o simplemente, porque no se quiere conocer” y que supone además, en el futuro, un descuento en los meses con derecho a prestación acumulados.

Los contratos parciales, de 5 o 6 horas semanales suponen, según explica Olga Alastruey secretaria provincial de FETE-UGT, un sueldo de “unos 300 o 400 euros al mes”. “Con eso una persona no vive y mucho menos si tiene que desplazarse a una localidad a 50 kilómetros”. Además, la portavoz sindical hace hincapié en cómo los interinos, por su condición, “no pueden ejercer otra actividad remunerada”. Propone, de esta forma, que se supriman las plazas inferiores a media jornada. “No costaría nada agruparlas y conseguir jornadas decentes para que la gente pudiera vivir”, afirma. Denuncia, junto a todo ello, que haya comenzado la contratación de los maestros el viernes (el curso comienza el lunes) y de profesores de Secundaria el miércoles (cuando el curso comienza el viernes). “Los claustros de profesores están siendo estos días, con lo que hay trabajadores que se están incorporando antes de haber firmado el contrato”, subraya Alastruey.

Jornadas laborales de dos horas

“Antes no se hacían contratos por menos de 6 horas semanales. Este año, con el ánimo de ahorrar, hay jornadas de 2 horas, que se completan con guardias u horas de permanencia en el centro”, comenta, desde Huste, su portavoz en Huesca, David Torralba. Será así, afirma, un curso con “jornadas dispares” a diferencia de años anteriores en los que se distinguía entre una media jornada de 9 horas y la parcial, antes mencionada, de 6 horas. “La gente necesita contar con unos recursos económicos, por lo que resulta necesario, en ocasiones, completar el sueldo con el paro”, añade Torralba.

Para Fernando Salas, del sindicato ANPE, se está dando con este fenómeno “una erosión progresiva de las condiciones de trabajo del profesorado interino”. “Venimos atendiendo consultas, desde antes del verano, de profesores que nos piden información sobre los requisitos necesarios para solicitar las prestaciones por desempleo, pues ya sabían que no podrían trabajar este curso o que lo harían en condiciones precarias”, señala Salas. Como asegura, se trata de plazas, en ocasiones, incluso inferiores a la media jornada, pero que el profesor acepta, aun lejos de su hogar, “para lograr con ello una experiencia y antigüedad que, a la postre, son determinantes para el futuro laboral del docente”.-