Turismo de Aragón

Los cámpings piden clasificarse por estrellas como los hoteles

Esta iniciativa trata de unificar la categoría de los alojamientos como ocurre en el extranjero. Habrá que adaptar las normativas autonómicas.

El camping Ciudad de Zaragoza
Los campings piden una clasificación por estrellas como los hoteles

Los cámpings españoles, incluidos los aragoneses, han solicitado pasar a clasificarse por un sistema de estrellas similar al que utilizan los establecimientos hoteleros. Con esta iniciativa, que parte de las asociaciones y empresarios del sector, se intenta unificar criterios y facilitar la información a los turistas y usuarios.


Para ello se ha puesto en marcha, a través de Turespaña, una comisión de trabajo en la que participan cinco representantes de las comunidades autónomas -con presencia de Aragón- y cinco del comité ejecutivo de la Federación Española de Empresarios de Camping (FEEC).


La próxima reunión tendrá lugar antes del verano, y tiene por delante la difícil misión de poner en común cada una de las normativas autonómicas que regulan este sector. “En Europa funciona hace tiempo el sistema de estrellas, por lo que consideramos lógico implantarlo aquí para no confundir a los numerosos turistas extranjeros que vienen a nuestro país”, explica Óscar Monedero, secretario general de FEEC.


En la actualidad, el ranquin va de lujo a primera, segunda y tercera categoría. “El problema está en que un camping de segunda en Cataluña podría ser de tercera en Aragón, o viceversa”, reconoce. La nueva clasificación oscilaría entre las cinco estrellas que presentarían los de lujo, como el Ciudad de Zaragoza -en total no llegan ni a una decena en todo el país-, hasta los de dos estrellas para los de menor nivel.


Para ello se pretende unificar criterios de calidad en todas las comunidades, como los metros cuadrados por parcela, la accesibilidad, servicios básicos, etc. Según sus impulsores, con este cambio se da respuesta a una de las pretensiones de la European Travel Commision, organización responsable de la promoción de Europa como destino turístico.


Sin embargo, desde la DGA existe cierto excepticismo ante la necesidad de cambiar todas las normativas autonómicas. "Aragón aprobó una regulación de los campings pionera en su momento, que fue imitada por muchas comunidades, por lo que se haría extraño tener que cambiarla", reconoce Elena Allué, directora general de Turismo de Aragón, aunque comparte el valor de unificar criterios, "como ya se ha hecho con el Turismo Rural".


Caen las pernoctaciones

El 2012 no fue un buen año para el turismo aragonés, cuyos establecimientos de alojamiento perdieron 123.000 clientes y hasta 465.000 pernoctaciones. Los datos del Instituto Aragonés de Estadística (IAEST) confirman la caída del número de viajeros, pero sobre todo la de servicios facturados por los alojamientos.


Los campings y casas rurales sufrieron pérdidas menos elevadas que los hoteles, aunque no por ello menos preocupantes. Las zonas de acampada aragonesas recibieron a 17.000 turistas menos, una caída del 5% que redujo en 29.000 el número de pernoctaciones. Este descenso se ha visto reflejado en la ocupación media anual, que se ha quedado en un 27% en todo Aragón, frente al 28,2% de 2011.