TRÁFICO/ARAGÓN

Huesca "Hay una curva de noventa grados y muchos se tragan la valla"

"Para salir del pueblo a la carretera N-240 un viernes por la tarde puedes estar esperando hasta 15 minutos porque el flujo de vehículos que vienen de Navarra o de Guipúzcoa con esquiadores que van a la nieve es impresionante". Son las palabras de Manuel Torralba, alcalde de Berdún, municipio enclavado en mitad del tramo viario más peligroso de la provincia de Huesca, según el último estudio del RACC. Los 13,8 kilómetros que separan Puente la Reina del límite con la provincia de Zaragoza, y que tienen un índice de circulación de 2.676 vehículos diarios, contabilizan una media de 4 accidentes anuales.


Torralba explica que el punto más peligroso está a unos 2 kilómetros de Berdún en dirección a Jaca, "porque hay una recta de kilómetro y medio y al final llega una curva de casi 90 grados que aunque está bien señalizada, mucha gente se sale y se traga la valla y de hecho Fomento no da abasto a repararla de la cantidad de choques que se producen". La solución llegará con la conversión de este tramo en autovía (A-21). El proyecto no se ha licitado aún, aunque el alcalde de Berdún confía en que no se demoren mucho los trámites "porque los dos tramos que hay a ambos lados ya están en obras y no pueden dejar en medio 13 kilómetros sin hacer".


Entre semana, poco tráfico


Fernando Sarasa, concejal de Berdún, también apunta a la circulación de los fines de semana hacia las estaciones de esquí como principal causa de esta peligrosidad, "porque el resto de la semana la verdad es que no soporta mucho tráfico". De hecho, su percepción como vecino de la zona es que "tampoco es una carretera tan peligrosa como la de Huesca a Barbastro, que yo la temo, aunque es cierto que lo que conoces siempre lo ves menos complicado". Con todo, Sarasa confiesa que cuando llega el viernes o el domingo "evito ir por el carril contrario al de los esquiadores".


El jefe provincial de Tráfico, Andrés Fernández del Río, reconoce que este tramo también está considerado como uno de los puntos negros según las estadísticas de la DGT. Un estudio realizado en 2007 arrojaba un índice de peligrosidad que doblaba la media del conjunto de la red nacional. Fernández del Río coincide en que las causas son la presencia de varias curvas cerradas y la alta velocidad de circulación.