Lucía, la niña de 7 años que ha abierto la puerta a las mujeres en el dance de Tardienta
El grupo, que ha completado este martes su representación central en honor de Santa Quiteria, llevaba más de tres décadas sin representación femenina.
Aunque se ha vestido de danzante, José Antonio Oto, natural de Tardienta, se ha quedado este martes sin chocar los palos. Durante toda la representación del grupo, su función ha sido la de dar instrucciones a los cuadros infantiles, donde estaba situada su hija, Lucía, de 7 años de edad, la primera mujer en danzar en más de tres décadas.
Al acabar la actuación, y ser preguntado por sus sensaciones, el veterano danzante ha necesitado tragar saliva y respirar hondo, sobrepasado por la "emoción y orgullo", ha señalado. A su lado, su hija se ha mostrado tranquila y sonriente, "muy feliz", ha dicho, tras haberse estrenado en la actuación central del dance de su pueblo, Tardienta.
Hace unos 30 años, algunos recuerdan que llegó a formarse un cuadro infantil de niñas, pero fue algo puntual y sin continuidad. Solo ocurrió esa vez en décadas y décadas de historia. "Me parece que únicamente estuvieron un año y no llegaron a hacer todas las mudanzas", ha señalado Oto, que confía en que esta vez la representación femenina vaya creciendo y pueda mantenerse en el tiempo.
De momento, las circunstancias son las propicias. De hecho, cada vez son más los grupos de dance que han incorporado con naturalidad a las mujeres. En Los Monegros, danzan en nueve de los once existentes. En Tardienta, aunque fue necesario hacer una votación interna, y hubo algunos opositores, la mayoría de los danzantes votó a favor de la entrada de Lucía, que, tal y como sostiene su padre, "derriba una barrera de género y abre la puerta a la incorporación de otras mujeres, ya sean niñas, jóvenes o mayores". "Me gustaría que se animaran muchas más", ha insistido, entre felicitaciones y abrazos de numerosos vecinos y vecinas que compartían su alegría.
A favor de la continuidad de la presencia femenina, también está la postura del mayoral del grupo, Miguel Ángel Ballestar, que se muestra "feliz" con la incorporación de Lucía. "Somos un grupo amplio y diverso, donde cualquier persona es bienvenida", ha señalado. "Hasta ahora, no se había dado la circunstancia. Nadie me lo había propuesto en los años que llevo como mayoral, pero ojalá haya otras que deben el paso y quieran sumarse", ha añadido.
La afición de Lucía se cimentó en casa, viendo a su padre y a su hermano, Leo, de 12 años, que comenzó a danzar en 2019. Además, al igual que otros niños y niñas, acudía a ver los ensayos, lo que hizo que creciera en ella el deseo de integrarse en el grupo. "Ha esperado este día con muchas ganas. Para ella, es un sueño cumplido", ha subrayado su padre, que ha estado acompañando cada uno de sus movimientos durante la representación central. En concreto, y junto al resto de danzantes infantiles, ha participado en tres mudanzas: El Duque, El Rey y La Hoja del Pino.
El amplio repertorio del dance de Tardienta ha finalizado con el vals de las cintas. Al destrenzarse la última, los integrantes del grupo han compartido abrazos y sonrisas, felices de cumplir con esta ancestral tradición.
El dance es una de las manifestaciones más ricas de Los Monegros, donde perviven un total de once formaciones en las localidades de Robres, Leciñena, La Almolda, Valfarta, Bujaraloz, Pallaruelo de Monegros, Castejón de Monegros, Lanaja, Tardienta, Sena y Sariñena. A excepción de estas dos últimas, el resto cuentan con mujeres en sus cuadros e, incluso, algunas han resurgido gracias a ellas.
Por segundo año consecutivo, el próximo 3 de junio tendrá lugar un encuentro de dances de Los Monegros. La actividad se llevará a cabo en la localidad de Sena, con pasacalles y actuaciones. Su objetivo es dar a conocer la riqueza y singularidad de estos entramados festivos, que están entre los más antiguos y ricos de Aragón. A las mudanzas y bailes, son varios los que suman una parte teatralizada, donde se incluye la pastorada, la lucha entre moros y cristianos así como los dichos o motadas. También incorporan varios personajes.
