La Policía Nacional ha alertado de una modalidad de estafa telefónica dirigida a comercios detectada en Huesca. El modus operandi consiste en que el estafador llama al teléfono fijo del comercio, identificándose como el representante de una empresa proveedora, manifestando que va a llegar a la tienda un pedido que había encargado el dueño del negocio, aportando al trabajador los códigos de envío de los paquetes. Asimismo, le solicita que le facilite su número de teléfono móvil para así poder dejar libre la línea fija del establecimiento por si llama la referida empresa de transportes.

A continuación, el estafador continúa la conversación a través del teléfono móvil. Y se recibe al mismo tiempo una llamada al fijo de la tienda, procedente de un compinche, que se hace pasar por el transportista. De esta forma, consiguen mantener al trabajador ocupado sin poder realizar ninguna comunicación para comprobar la información, y confundido al estar apremiándole por dos canales al mismo tiempo.

Durante dichas conversaciones, el estafador que simula ser de la empresa de transportes manifiesta que hay uno de los paquetes que está pendiente de pago. Y el de la proveedora le dice que está al habla con el jefe del comercio y que este autoriza a que efectúe el pago. 

Para dar credibilidad a esta historia, los timadores han obtenido previamente datos de los encargados o dueños del negocio, como su nombre y apellidos, y apremian al trabajador y lo asustan con graves consecuencias para el negocio si no proceden a realizar el pago urgentemente.

Ante la urgencia que imprimen y las amenazas por las consecuencias, y ante el temor de causar un daño al negocio del que puedan culparles, las víctimas acceden a recabar todo el dinero que pueden de la empresa, e incluso sacan dinero propio para adelantarlo y realizar los pagos que le solicitan.

El pago puede realizarse de diferentes formas, habiéndose observado en las últimas denuncias presentadas que los estafadores solicitan que se realice el pago mediante la compra de tarjetas prepago digitales, tipo Google Play, Paysafecard o Steam, que sirven para productos por Internet. 

Los estafadores solicitan que las víctimas envíen foto de dichas tarjetas y de sus códigos de activación para así poder hacer uso de las mismas. Estas tarjetas se puedan comprar de forma física en diferentes establecimientos, como estancos, indicando incluso los estafadores el lugar más próximo donde pueden acudir a comprarlas.

Ante este tipo de estafas, la Policía ha vuelto a reiterar una serie de consejos para evitarlas. 

- Colgar la llamada y comprobar por tus propios medios la información, poniéndote en contacto con el dueño del negocio o con la empresa suministradora o de transporte que hayan utilizado como pretexto

- No realices ningún pago ni facilites información bancaria.

- Ante cualquier duda o sospecha, ponte en contacto con la Policía e informa de todos los datos que recuerdes