El Parque Nacional inicia en el valle de Pineta una de las obras pendientes del centenario
Está adecuando un parquin provisional antes de acometer la reforma del puente y nuevos equipamientos para las visitas.
El proyecto para mejorar la visita al valle de Pineta (Bielsa), una de las obras que quedaron pendientes en el centenario del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido en 2018, por fin se va a ejecutar. Con una inversión de 845.000 euros, resolverá el riesgo de inundación de esta entrada al espacio protegido y el estacionamiento incontrolado, con la construcción de un nuevo puente y un parquin para más de 250 vehículos.
Antes de iniciar las obras en mayo, es necesario construir un aparcamiento provisional, cuyos trabajos han comenzado esta semana. Desde el lunes se está acondicionando una finca particular, en colaboración con el Ayuntamiento de Bielsa, que presta maquinaria y alquila los terrenos. Se allanará el suelo, se señalizarán los accesos y se marcará la superficie, para dejarlo preparado de cara al aluvión de turistas de las vacaciones de Semana Santa. Su capacidad es de 415 plazas, más 10 para discapacitados, seis para autobuses y 20 para autocaravanas.
Las obras se financiarán con cargo a los fondos europeos, que dejarán en todo el Parque Nacional casi 10 millones de euros para poder ejecutar las obras de mejora de la visita pendientes desde el 2018. El director general de Medio Natural del Gobierno de Aragón, Diego Bayona, ya dijo que se empezarían a gastar en 2022. El Gobierno de Aragón gestionará directamente más de 6 millones y a estos se añaden 3,3 millones para construir el futuro centro de visitantes de Escalona, que costea el Organismo Autónomo de Parques Nacionales, cuyas obras empezaron a finales del año pasado.
Del dinero gestionado por Aragón, la parte más importante, 3,7 millones de euros, se destinará a la construcción y mejora de infraestructuras de uso público para potenciar los diferentes accesos y organizar las visitas, de forma que se consiga reducir el impacto del turismo. En concreto se trata de las actuaciones mencionadas en Pineta y de nuevos aparcamientos en el sector de Escuaín y en Fanlo, Tella y Revilla.
La obra más cara de las planificadas en el valle de Pineta es el nuevo puente sobre el río Cinca, que pasa de 12 metros de longitud a 40, evitando cualquier riesgo ante una crecida. En Semana Santa estará clausurado, pues el parquin provisional se localiza en la margen izquierda y no es necesario cruzar el río. Según el Ayuntamiento, el puente se ha declarado no transitable debido a su mal estado.
Además, el plan de equipamientos contempla un nuevo parquin, situado en la zona periférica de protección, con capacidad para 259 turismos y 5 autobuses, con dos zonas diferenciadas: una superficie asfaltada para invierno y otra de suelo natural y viales acondicionados para el resto del año. El conjunto supone "una mejora sustancial" para los visitantes, explicó el alcalde de Bielsa, Miguel Noguero, quien destacó las dimensiones del puente, que la CHE obligó a sobredimensionar por el riesgo de inundación.
