Candanchú explica el cierre anticipado para asegurar la viabilidad de la estación
La estación de esquí justifica el adelanto del fin de temporada por los elevados costes energéticos y la disminución de clientes y aclara que recibió de la DGA un préstamo a devolver y no subvenciones a fondo perdido.
"Nuestro ánimo es garantizar la viabilidad de la estación". De esta forma ha explicado la estación de esquí de Candanchú la decisión de poner fin a la temporada el próximo 3 de abril, en lugar del día 17, como inicialmente estaba previsto. En un comunicado hecho público este martes, entiende "el malestar que haya causado a clientes y establecimientos", pero afirma que solo busca invertir los recursos generados este año "en la mejora continua de cara a la temporada 2022-2023", para asegurar la apertura el próximo invierno y seguir siendo un motor económico en el valle del Aragón. Por otra parte, el acuerdo alcanzado este año con la vecina estación de Astún permite a los clientes hacer uso de estas pistas.
Cuando la estación cierre el próximo domingo habrá permanecido abierta 122 días, desde el 2 de diciembre. "Hubiera sido nuestro deseo haber podido culminar la temporada en las fechas inicialmente previstas pero los elevados costes energéticos soportados complican las cuentas de la estación", aclara. La factura eléctrica en su caso se ha disparado un 161%.
Otro factor ha sido el empeoramiento de la calidad de la nieve, así como la considerable disminución de la afluencia de esquiadores desde la segunda quincena del mes de marzo y las bajas perspectivas de cara al mes de abril.
La estación del valle del Aragón reabrió esta temporada tras pactar con el Gobierno de Aragón una línea de crédito de dos millones de euros para cubrir los gastos de apertura, que debe devolver en cuatro años con uno de carencia. "Después de dos años durísimos debidos a la pandemia la estación pudo finalmente abrir esta temporada gracias al esfuerzo de sus trabajadores, clientes, proveedores, accionistas y a conseguir nuevos préstamos de entidades financieras y del IAF", señala, pero niega que haya recibido subvenciones a fondo perdido, "tal y cómo erróneamente se manifiesta en algunas redes sociales o declaraciones".
Los nuevos recursos aportados por los accionistas, por acreedores financieros, así como el resultado positivo que se prevé este año, han ido íntegramente, según la empresa, a cumplir las obligaciones de pago con proveedores, la mayoría de ellos del valle del Aragón, así como a la puesta a punto de la estación para tener una muy buena temporada.
Candanchú reitera su apuesta por un proyecto conjunto de la nieve en la Comunidad Autónoma que entiende debe ser liderado por el Gobierno de Aragón y por la empresa Aramón, participada al 50% por la DGA, cómo actores principales. "Vemos con preocupación como otros competidores de nuestro país están avanzando en proyectos de calado con financiación de fondos Next Generation y entendemos que no tenemos tiempo que perder en un sector estratégico y generador de riqueza para nuestra comunidad", concluye.
