El hielo dispara los accidentes de montaña en el Pirineo, 40 en solo tres semanas

El número de incidentes gestionados por el servicio de emergencias del 112 Aragón durante el mes de enero en las montañas de Aragón ha sido superior al de otros años, con 28 relacionados con accidentes durante la práctica de esquí y 12 en otras actividades de montaña, en total 40 en estas tres semanas. La causa está en las difíciles condiciones que vive el Pirineo en los últimos días, con nieve helada por las bajas temperaturas. En solo 10 días hubo que activar en siete ocasiones el helicóptero del 112 para atender a esquiadores. 

Los datos los ha dado a conocer este viernes la directora general de Protección Civil e Interior del Gobierno de Aragón, quien ha ofrecido una rueda de prensa acompañada del presidente de la Federación Aragonesa de Montaña (FAM) para hacer un llamamiento a la prudencia en las actividades invernales, mensaje que en los últimos días han reiterado numerosos organismos relacionados con la seguridad, a raíz de la muerte de seis personas desde el 12 de enero: tres esquiadores en Astún en menos de una semana, otro en el pico Aspe, una española que hacía raquetas en el Midi d'Ossau francés y el más reciente, un navarro, mientras practicaba esta misma actividad en Belagua.  

La campaña Montaña Segura y el 112 han preparado un mensaje específico para esta situación que se lanzará hoy mismo en las redes sociales y que se quiere hacer llegar también a montañeros de otras comunidades, como el País Vasco o Navarra, habituales en el Pirineo aragonés.  

Carmen Sánchez ha comentado que en esta época la atención suele estar en los aludes. Y sin olvidar este riesgo, ahora hay que estar pendiente del hielo y la nieve dura debido a la sucesión de varios días de bajas temperaturas, que ha convertido las pendientes en un terreno peligroso, ya que en caso de un resbalón es muy difícil detener la caída.

"Desde la semana pasada, hay condiciones muy difíciles que elevan el peligro y obligan a extremar la precaución", ha declarado. Condiciones que, según ha confirmado la Aemet, se van a mantener. Por ello, de cara al fin de semana y la previsión de numerosos practicantes de deportes invernales se ha querido insistir en el mensaje. El sol y el buen tiempo, ha aclarado la responsable de Interior, "puede hacer que esquiadores y montañeros se confíen". 

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Las recomendaciones del Gobierno de Aragón varían según la actividad, si se practica esquí alpino, raquetas o esquí de montaña. En el primer caso lo importante es no salirse de las pistas balizadas y seguir las instrucciones de los centros invernal. Carmen Sánchez ha recordado la primera muerte ocurrida en Astún, de un joven que se encontraba fuera de pistas.  

En el caso de las raquetas, el consejo es evitarlas si no se conoce la ruta y asegurarse de que el terreno no ofrece peligro. "Las raquetas están preparadas para avanzar por nieve, no por hielo", ha advertido Sánchez. Y en el esquí de montaña, se considera imprescindible llevar casco, piolet y crampones, y saber usarlos. Hay que evitar los pasos y rutas más expuestas al hielo, buscar itinerarios en los que la nieve no esté helada y consultar a los expertos de cada zona sobre el estado de los mismos. 

"Hay 225 kilómetros esquiables en Aragón y somos una comunidad privilegiada, y lo que queremos es que sigan acercándose visitantes, pero que lo hagan en las mejores condiciones y siendo prudentes", ha declarado la directora general. 

Por su parte, el presidente de la FAM,  Javier Franco, ha incidido en el mensaje de prudencia porque existe un peligro de hielo "extremadamente duro, hielo cristal", que aunque se lleve buen material "es difícil que clave bien". "La montaña invernal es la que requiere más conocimientos técnicos", ha dicho, aludiendo al colectivo montañero que sale a esquiar, a hacer raquetas o a practicar alpinismo. "Las condiciones del manto varían mucho según la zona del Pirineo, por eso es importante informarse bien de las condiciones y saber valorar el estado de la montaña. En caso contrario debemos renunciar, no podemos arriesgarnos a tener el mínimo tropiezo, porque puede suponer una caída por un desnivel importante". 

Cómo actuar

Estas son las recomendaciones que se van a trasladar desde Protección Civil y que varían según el tipo de actividad que se realice. El objetivo es que los esquiadores y montañeros hagan actividades adecuadas a su perfil y experiencia y que tomen decisiones que garanticen su seguridad:

1. Esquí alpino: evitar los fuera pistas y atender a las recomendaciones e indicaciones del centro invernal. No salirse de las pistas balizadas.

2. Raquetas de nieve: evitar las actividades con raquetas salvo que se conozca que la ruta elegida está en condiciones seguras (sin hielo) o se trate de un recorrido llano y sin pasos expuestos. Las raquetas suelen tener unos pequeños clavos para asegurar ligeramente el paso por zonas de nieve dura o helada, pero estos clavos no son suficiente para asegurarse en zonas con hielo. Además, y más importante, al ir con bastones y sin piolet, en caso de caída o deslizamiento por la pendiente es imposible parar.

3. Esquí de montaña, media y alta montaña con piolet y crampones:

a. Imprescindible llevar y saber utilizar piolet, crampones y casco. Autodetener una caída en esta nieve dura-hielo puede ser muy complicado incluso para montañeros expertos: en muy pocos segundos se alcanza una gran velocidad.

b. Evitar los pasos y las rutas más expuestas (hielo o nieve muy dura en pendientes pronunciadas y largas). Hacer actividades más sencillas

c. Buscar itinerarios/zonas en los que la nieve no esté helada.

d. No confiarse en que a medida que avance el día la nieve transformará: hay zonas donde se mantiene helada todo el día

e. En caso de duda, darse la vuelta antes que afrontar un paso helado y expuesto.

f. Es conveniente consultar a los expertos en cada zona sobre el estado de la ruta que se propone hacer y evitarla si tiene fuerte presencia de hielo. Para ayudar a elegir itinerarios más seguros puede ser de utilidad la cartografía ATES, que al clasificar los terrenos en simples, exigentes y complejos puede ayudar a identificar los terrenos simples y evitar los complejos y, por ende, más peligrosos.