Polémica por un nuevo enlace de la A-21 en Puente La Reina: "Muchos negocios de toda la vida van a sufrir graves pérdidas"
El Ayuntamiento rechaza el proyecto del Ministerio que, ante el bloqueo de las obras de la autovía, se gastará 6 millones de euros en una conexión más directa con la N-240 que desviaría el tráfico que pasa por la localidad.
No siempre las inversiones del Ministerio de Transportes son bienvenidas, o al menos la forma de ejecutarlas. Es lo que les ha ocurrido a los vecinos de Puente La Reina de Jaca, un pequeño pueblo de apenas 250 habitantes que ‘vive’ de los viajeros que pasan en coche, en camión o en autocaravana de camino al Pirineo o hacia Navarra y paran a echar gasolina, a comprar pan o a tomarse algo en uno de sus bares y restaurantes. Y es que un nuevo enlace con la A-21 amenaza con quitarles gran parte de su medio de vida ya que conectaría más directamente con la N-240 evitando el paso por su travesía.
Así lo consideran desde el Ayuntamiento, que han decidido presentar alegaciones al proyecto de ‘Obras complementarias de la autovía A-21 en el tramo Santa Cilia-Puente La Reina de Jaca’ que está en exposición pública y que prevé construir un nuevo enlace de 1,4 km con una inversión de algo más de 6 millones de euros entre los trabajos de construcción y las expropiaciones. Se sumarían a los 30 millones que ya costó el tramo, inaugurado hace dos años.
El Ministerio justifica su actuación reconociendo que aunque el proyecto del siguiente tramo (Puente La Reina-Fago) se aprobó en 2016, las obras todavía no se ha sacado a concurso "ni hay previsión de fechas de licitación próximas". De hecho, en los Presupuestos Generales del Estado de 2022 solo se contempla una partida de 100.000 euros, por lo que seguirá bloqueado un año más.
Hasta que se ejecute y ponga en servicio el citado tramo, la conexión entre la A-21 y la N-240 se realiza a través del enlace de Puente la Reina aunque es necesario atravesar tres glorietas en sentido Pamplona y dos si se circula hacia Jaca, obligando en ambos casos a los vehículos a pasar por la travesía y utilizar 500 m de carretera autonómica.
Problemas de seguridad y atascos por el tráfico hacia las estaciones
"Esta situación provoca problemas de seguridad vial y retenciones, ya que las vías son principalmente utilizadas para acceder a las pistas de esquí, por lo cual los tráficos normalmente tienen una dirección predominante, en hora punta, de forma que las glorietas provocan una disminución de velocidad que disminuye la capacidad de la vía", señala el proyecto de la consultora Prointec.
"No lo vemos bien porque mucha gente del pueblo vive de los negocios de toda la vida que hay junto a la carretera como la gasolinera, la panadería, la farmacia o los restaurantes y bares. Ellos dependen de los vehículos que pasan procedentes de Navarra, del País Vasco... y si dejan de venir, van a tener unas pérdidas económicas muy considerables", alerta el alcalde, Sergio Fanlo (PAR).
Los vecinos piden una alternativa
Por ello, van a tratar de hacer todo lo posible "para que echen atrás el proyecto y busquen una solución alternativa", reclama. Y es que aunque comprenden que el Ministerio quiera tomar medidas para mejorar la seguridad, "creemos que se podría haber hecho de otra manera porque va a ser a costa de un precio muy alto para muchas familias", opina.
La actuación consiste en finalizar el kilómetro de autovía de este tramo hasta el punto de inicio del siguiente y a continuación realizar un ramal de conexión directo entre la A-21 y la N-240 al oeste del pueblo de Puente La Reina. Tendría dos carriles de 3,5 m y una velocidad máxima de 70 km/h. Además, se contempla la mejora del firme de un tramo de dos kilómetros de la N-240 entre la glorieta de Puente La Reina y este nuevo enlace, así como la ejecución de dos caminos de acceso a fincas particulares.
El otro tramo de la A-21 que sigue bloqueado es la variante de Jaca que enlazará con la A-23 ya que en los PGE de 2022 también tiene una partida de solo 100.000 euros para un proyecto con un coste estimado de 115 millones.
