Los esquiadores descuentan ya los días para volver a deslizarse por las pistas del Pirineo oscense tras el fiasco casi total de la pasada temporada (solo abrió Astún) por culpa de la pandemia. Las estaciones siguen sin confirmar la fecha de inicio de campaña, pero los pronósticos de nieve encarrilan su esperada reapertura para finales de mes.

Varios portales especializados en previsiones a más largo plazo (J2ski, wetterzentrale, freemeteo, meteored, meteoconsult o meteoexploration) coinciden en anunciar nevadas para mediados de la próxima semana (algunos incluso los adelantan al día 22), lo que permitiría poner los centros a punto para su estreno el último fin de semana de noviembre. Fecha en la que ya esperan estar abiertas otras estaciones de la competencia cercana como Baqueira, La Molina o Boí Taüll.

En la Agencia Estatal de Meteorología son más cautos recordando que la fiabilidad de los pronósticos a más de tres días es muy baja. El delegado territorial en Aragón, Rafael Requena, explicó que tras los 10 cm de nieve reciente caída en la madrugada del lunes, esta semana no se esperan más precipitaciones ya que estará dominada por un anticiclón, "pero de cara a la siguiente, parece ser que pueden venir nuevas vaguadas que con suerte podrían dejar más nieve". "Yo estaría encantado de que eso pasara, pero no hay que dar falsas esperanzas, hay que esperar. Los pronósticos a diez días son algo divertido cuando existe la posibilidad de que pase lo que uno quiere, pero también puede ocurrir todo lo contrario", recalcó.

Todas las estaciones del Pirineo manejan esos mismos pronósticos de nieve la próxima semana. Desde el grupo Aramón aseguraron estar ya preparados para abrir "en cualquier momento", y de hecho mantienen su plan de estrenar la temporada el último fin de semana de noviembre. Añadieron, no obstante, que solo dependen del tiempo, "que está cambiante por lo que debemos ir día a día viendo qué pasa". Este lunes amanecieron con una fina capa de nieve en Formigal-Panticosa y en Cerler y un descenso de temperaturas. A falta de nieve natural, tampoco se han dado en su caso las condiciones de frío necesarias para producirla de forma continuada y sostenible, "solo de forma puntual".

Astún también se despertó con unos 10 cm de nieve que fueron muy bienvenidos "porque permiten crear una buena base y aprovechar mucho más todo lo que caiga a partir de ahora", explicó Andrés Pita, director comercial de la estación. Tampoco han activado todavía los cañones porque las ventanas de frío han sido hasta ahora muy cortas. Por eso, Pita hizo hincapié en que "falta que nieve un poco más para poder abrir". "Todos los modelos apuntan a que la próxima semana pueda cambiar el tiempo, aunque a tantos días vista no son muy fiables. Pero si se confirmaran y cayera una pequeña nevada, estaríamos ya en predisposición para abrir. Y ojalá pudiera ser para finales de la próxima semana", desea.

Mientras, Candanchú recibió 5 cm en cotas altas. En su caso, siguen cumpliendo los plazos del plan de trabajo que se marcaron para poder abrir el día 4 de diciembre y aprovechar así el puente. Las pruebas de carga y revisiones de los telesillas no finalizarán hasta la próxima semana y tampoco han puesto en marcha aún los cañones, solo en pruebas. Su director, Álvaro Luna, es optimista y confía en que se confirme un frente frío que anuncian a partir del día 20 "porque esa nieve nos daría la base suficiente para abrir". No obstante, admite que miran los partes meteorológicos cada muy poco tiempo "porque cambian constantemente".

En el espacio nórdico de Llanos del Hospital de Benasque contabilizaron unos 10 cm aunque su director, Mario García, afirmó que todavía es "insuficiente" para pensar en la apertura, que siguen fijando para el puente de la Inmaculada.