Satisfacción en los hoteles de Huesca: "Este agosto estamos trabajando más que nunca"

El nivel de ocupación de los establecimientos de la capital está por encima incluso del año 2019. 

Grupo de turistas frente al Ayuntamiento de Huesca durante una visita guiada a la ciudad.
Grupo de turistas frente al Ayuntamiento de Huesca durante una visita guiada a la ciudad.
Heraldo.es

Los establecimientos hoteleros de Huesca afirman que este mes de agosto han estado “a tope”. A pesar de que no se hayan celebrado actos la semana de las Fiestas de San Lorenzo, mucha gente, la mayoría turistas españoles, han acudido a los hoteles de la ciudad aprovechando sus vacaciones para después poder subir a la montaña.

El hotel Sancho Abarca, situado en el Coso Alto, “ha subido 3 o 4 puntos el nivel de ocupación con respecto al año 2019”, asegura su director Roberto Pac. Hace dos años la afluencia era “muy alta y había muchísimas reservas”, y en 2021 están trabajando “con precios de hace tres o cuatro años, porque además los gastos han subido muchísimo”, afirma. La previsión para lo que queda de verano también es “muy buena”, ya que, “si la pandemia nos respeta, el nivel de ocupación se mantendrá porque las reservas se están haciendo con buena intensidad”.

Sin embargo, el establecimiento tampoco puede asegurar una estabilidad, porque “debido a la falta de acontecimientos en la ciudad, la gente se mueve poco, por lo que no podemos decir que tenemos un flujo de clientes claro”, confiesa Roberto Pac, cuya principal inquietud es “cuando acabe el turismo de este verano, pero esperamos que empiece a haber acontecimientos en la ciudad”. Por otra parte, la semana de San Lorenzo mantuvieron un “lleno total”. “Los clientes no venían de propio a las fiestas, simplemente se tropezaron con ellas, pero aun así el hotel se quedó sin hueco para más reservas”, destaca satisfecho.

"Estamos trabajando más que nunca"

El Pedro I es otro de los establecimientos hoteleros más concurridos en Huesca. Carlos Navarro, su director, afirma que este mes de agosto están “a tope”. “Estamos trabajando más que nunca, con un nivel de ocupación del 99% todo el mes”, dice, a pesar de la ausencia de las fiestas, uno de los principales motivos por los que el hotel se llenaba en agosto. “Es diferente respecto a otros años, porque cuando había San Lorenzo llenábamos el hotel con gente que venía de propio”, indica Navarro, apuntando que ahora “la gran mayoría de turistas son nacionales que están de vacaciones”.

El director afirma que, para lo que queda de mes, “todo sigue como un tiro y la semana que viene también está llena de reservas”. En septiembre la cosa tampoco cambia, ya que “la previsión es muy buena, porque todavía hay gente que sigue de vacaciones y las empresas se vuelven a poner en marcha, por lo que tenemos muchos clientes de empresa”, afirma con optimismo.

El principal problema que manifiesta Carlos Navarro es que “los comercios y los establecimientos hosteleros sigan cerrando a partir del día 16 de agosto”. “Esta semana, por ejemplo, todos los hoteles están llenos y la gente sale a comer fuera y se encuentran con muchos sitios cerrados. Se está luchando desde hace años para que eso suceda lo menos posible, pero sigue pasando”, lamenta el director del Pedro I.

Situación diferente

El Aparthotel Huesca vive una situación diferente. Gran parte de sus clientes son de largas estancias debido a que también son apartamentos, por lo que les queda un bajo porcentaje de plazas para la rotación. A pesar de esto, su director, Miguel Omiste, indica que “se han hecho bastantes reservas en los meses de julio y agosto”. “El año pasado, nosotros íbamos en función de las restricciones de los horarios porque cuando se ampliaban, había reservas, pero cuando se limitaban,  se cancelaban”, explica. En contraste, en 2021 ha habido “bastante movilidad, y eso se ha notado”.

Para la semana laurentina, el director confiesa que “ha sido sorprendente porque nosotros pensábamos que no habría mucho movimiento estas fiestas, pero hemos acogido a familias que venían a pasar uno o dos días para luego subir al Pirineo, o bien franceses que hacen lo mismo, pero para ir a la playa”. Su objetivo para lo que queda de temporada estival es mantener las cifras "porque cuando llegue septiembre será otra cosa con el comienzo de los cursos escolares”, se teme Omiste.

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