"Circular por el carril bici es como jugar una yincana, crea confusión e inseguridad"
La Asociación Huesca en Bici solicita "rematar" los 15 kilómetros de carriles que hay en la ciudad para dar más seguridad. El Ayuntamiento ultima mejoras en dos de los tramos.
"Circular por el carril bici es como jugar una yincana porque de repente te baja a la calzada o te encuentras un bordillo. Está mal rematado". Son palabras de Samuel Escámez, portavoz de la Asociación Huesca en Bici, quien valora los avances impulsados en los últimos años por el Ayuntamiento para promover el uso de los vehículos de dos ruedas, aunque considera que todavía queda camino por andar para que la circulación en bicicleta sea 100% segura.
El consistorio anunció hace poco menos de un año su intención de interconectar los 15 kilómetros de carriles bici de la ciudad (sin contar con las vías ciclables) y a estas alturas aseguran que todos los trabajos están hechos a excepción de dos tramos en las calles María Moliner e Ingeniero Pano, cuya licitación se está ultimando.
Escámez reivindica una continuidad de "formato" en estos carriles "porque vas cambiando de ambiente continuamente pasando de una acera a la calzada y esa mezcla provoca confusión e inseguridad". Por ello, recomienda a los responsables municipales "que se den un paseo en bici porque se van a dar cuenta enseguida de lo que tienen que hacer".
Llama la atención, por ejemplo, sobre el carril de la avenida de los Danzantes "que no se sabe muy bien qué es porque se comparte con los peatones". Por ello, han pedido que lo bajen a la calzada aprovechando que se podría ganar espacio de los dos carriles e incluso de la línea de aparcamiento. "De repente se te acaba y te hace bajar a la calzada, así que o lo pones todo por la calzada o lo pones todo por la acera".
También piden medidas para delimitar mejor el nuevo carril bici de Ramón y Cajal "porque está lleno de peatones siempre o de gente que se cruza sin mirar".
Desde la asociación aplauden la señalización de calzadas de uso compartido. Pero reclaman mayor presencia policial en algunas zonas muy transitadas como el Coso para informar a peatones y ciclistas de los lugares por los que deben circular «"porque aunque estén al mismo nivel, hay zona de calzada y de acera igualmente".
Su lista de reivindicaciones se completa con la eliminación de semáforos "porque son negativos para dar fluidez a los peatones y ciclistas y en calles que ya están limitadas a 30 kilómetros por hora son innecesarios"; o instalar más aparcabicis (hay unos 150 en la ciudad) "porque ha aumentado mucho el uso de la bicicleta y cada vez más gente los usa de noche como plaza fija".
41 sanciones desde 2020
Según datos facilitados por el Ayuntamiento, desde 2020 ha habido 148 incidencias relacionadas con ciclistas y bicicletas por robos, accidentes, quejas por velocidad excesiva... Ello ha dado lugar a 41 sanciones (36 en 2020 y 5 en 2021) por circular por zonas prohibidas o en dirección contraria, por saltarse semáforos en rojo o por hablar por el móvil. Además, la Policía Local ha retirado 21 bicis al depósito por abandono, sustracción o infracción.
