El sector turístico se manifestará el día 23 en Huesca contra los cierres provinciales
La Asociación de Hostelería y Turismo convoca una protesta a la que ya se están sumando otros colectivos.
El malestar de los empresarios turísticos ante las restricciones de movilidad entre Zaragoza, Huesca y Teruel ya se ha traducido en la convocatoria de una gran manifestación en la capital oscense el 23 de diciembre a las 11.00, impulsada por la Asociación de Hostelería y Turismo de la provincia "para reivindicar el derecho al trabajo de las miles de empresas y familias que viven de esta actividad". Esa era la fecha prevista para la apertura de las estaciones, que finalmente se ha retrasado al mantener el confinamiento de las provincias.
Después de la comparecencia el sábado del presidente Javier Lambán en la que anunció la prórroga del cierre provincial, que inicialmente se iba a levantar el día 21 y se pospone hasta el 12 de enero, el sector turístico y hostelero ha anunciado que saldrá a la calle. La convocatoria alude además a los meses de incertidumbre que lleva soportando.
Asociaciones como la de Empresarios de Comercio y Servicios de la Jacetania (Acomseja) ya han respaldado la movilización del día 23, dada la "crítica situación de los negocios" de la comarca derivada de la pandemia, y de las restricciones de movilidad, confinamientos, limitaciones de aforos y otras medidas. El tejido empresarial de toda la comarca depende directamente casi en su totalidad del turismo de toda temporada, pero especialmente del de la nieve, señala en un comunicado.
La última medida de restricciones de movilidad en estas próximas fechas navideñas supone "un golpe definitivo para los cientos de familias, negocios, trabajadores y autónomos de todos los sectores de la zona, sin excepción, que dependen del mismo". Añade que las medidas económicas adoptadas hasta ahora han sido "insuficientes, nulas en muchos casos", por lo que exige otras para "asegurar la supervivencia". "No ponemos en duda la necesidad sanitaria de estas medidas adoptadas, pero si hay cierre, tiene que haber ayudas económicas reales y suficientes, no pueden permitir el hundimiento económico de esta comarca de la Jacetania ni el de nuestras comarcas vecinas".
El pasado 12 de diciembre, cientos de personas se movilizaron en las estaciones de esquí bajo el lema SOS Nieve para pedir la apertura o un plan de rescate para el sector. El malestar se ha disparado al conocer que la temporada de esquí tampoco arrancará la víspera de Nochebuena.
Las pérdidas en diciembre
Diciembre ya se da ya por perdido y con él miles de visitantes y de pernoctaciones. El año pasado, los hoteles del Pirineo aragonés registraron en este mes 55.726 viajeros (la media en los últimos cinco años fue de 50.275) y 146.240 pernoctaciones (120.160), y por los apartamentos turísticos pasaron 9.759 personas que generaron 30.000 pernoctaciones.
El sector ha pedido un plan de rescate, pero Javier Lambán no da por perdida la temporada. "Habrá que ver qué tipo de impacto van teniendo las decisiones sanitarias y qué tipo de decisiones empresariales se toman, para en definitiva saber cuál es el perjuicio concreto que se le causa", declaró. Sí mostró "una voluntad positiva del Gobierno para ayudar a estos sectores, pero habrá que ver en qué términos se produce el impacto y cuál es el perjuicio. Nunca hemos dejado a nadie tirado, con mayores o menores cuantías hemos ayudados a todos los sectores perjudicados".
El impacto económico de la nieve
El sector de la nieve es clave en la economía de Aragón y sobre todo de la provincia de Huesca. Su impacto en el territorio se ha cifrado en 150 millones de euros por temporada y distintos estudios calculan que la media de gasto por esquiador es de 68 euros al día.
Las estaciones aragonesas reciben una media de 1,5 millones de visitantes. Con un 30% del dominio del país (366 km), absorben más de una cuarta parte del mercado nacional, según la Asociación Turística de Estaciones de Esquí de España.
Además, los hoteles del Pirineo registraron la campaña 2018/2019 un total de 223.092 viajeros, según datos del Instituto Nacional de Estadística. La del 2019/2020 no se completó, ya que acabó de forma anticipada en marzo por la pandemia.
La capacidad de los alojamientos hoteleros es de 45.000 camas en un radio de 35 kilómetros de las estaciones, 6.000 de ellas a pie de pistas. Con las actuales restricciones de movilidad, está disponible un porcentaje bajísimo.
Respecto al empleo directo, ronda los 1.300 trabajadores, y 12.000 indirectos en temporada. Diciembre y enero de 2019 sumaron 4.304 contratos en el sector servicios, casi todos vinculados a la nieve en los siete principales municipios a pie de pistas.
