El valle del Aragón se queda sin nivólogo y sin boletín de aludes
El centro A Lurte, abierto en 2013, no dará servicio este año, salvo las visitas a cargo de los técnicos de la Oficina de Turismo. El Ayuntamiento ha renunciado al contrato después de que lo anulara el Tacpa.
El valle del Aragón no tendrá este invierno boletín de peligro de aludes ni un servicio de nivología que ofrezca cursos específicos sobre seguridad en montaña. El Ayuntamiento de Canfranc, que en 2013 abrió A Lurte, dedicado al estudio de la nieve y las avalanchas con distintas actividades, ha decidido este año prescindir del servicio. Solo abrirá para visitas guiadas realizadas por personal de la Oficina de Turismo.
El Ayuntamiento inició el pasado mes de junio el procedimiento de contratación para la ‘Formación, docencia y documentación del centro A Lurte de prevención de riesgos de montaña’. El contrato tenía un valor de 140.000 euros y una duración de dos años, prorrogables otros dos. Se presentaron cuatro ofertas, seleccionando en agosto una de ellas por importe de 120.000 euros. Sin embargo, la adjudicación fue recurrida por otro de las aspirantes mediante la interposición de un recurso.
Dos meses después, el Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón (Tacpa) estimó el recurso y anuló la adjudicación, retrotrayendo el procedimiento al momento inmediatamente anterior a la presentación de ofertas y obligando a convocar una nueva licitación. El Ayuntamiento ha decidido finalmente renunciar al contrato alegando "motivos de interés público" debido a "la situación sanitaria y económica" del país.
Una de las funciones de A Lurte consistía en emitir boletines de aludes para el valle del Aragón, tres semanales, a cargo de un nivólogo. De hecho era el único que ofrecía información específica para un valle en la Comunidad Autónoma, ya que el de la Aemet es para todo el Pirineo. El contrato también incluía visitas de estudio, encuentros, jornadas formativas, congresos y actividades divulgativas.
Entre sus últimas encomiendas estaba la realización de un inventario de las obras centenarias en el monte de los Arañones para proteger Canfranc de las avalanchas de nieve, que han llegado dos veces hasta la localidad, en 1974 y en 1986. La idea era conocer el deterioro de estas infraestructuras y plantear mejoras.
El Ayuntamiento ha justificado que si bien las difíciles condiciones de la pandemia ya existían antes del contrato, "han empeorado" en estos últimos meses. Las visitas seguirán, a cargo del personal de la oficina de turismo, explicó el alcalde. Fernando Sánchez basa la renuncia del contrato en la emergencia sanitaria y el gasto que implica esta crisis para las arcas municipales. "Porque este año no se saque no pasa nada, tampoco es una competencia propia del Ayuntamiento", aclara. Respecto a la información nivológica, el primer edil recuerda que está cubierta con los boletines de riesgo de avalanchas que en invierno emite diariamente la Agencia Estatal de Meteorología.
