iglesia
Sin misa del Pilar en varios pueblos de Somontano y Sobrarbe por la cuarentena del párroco
El sacerdote José María Carrera está a la espera de que le hagan la PCR tras llevar la comunión a una anciana a su casa de Colungo. La mujer ha dado en positivo en covid-19, como otros cuatro vecinos.
José María Cabrero, párroco de Alquézar y que atiende a una veintena de poblaciones en la zona, se ha visto obligado a poner freno a su intensa actividad. El sacerdote está desde este jueves confinado en su casa a la espera de que el martes le realicen la prueba para comprobar si tiene covid-19. Esta circunstancia supone que una docena de poblaciones del norte de la comarca de Somontano y de la parte más alta del valle del Vero, ya en el Sobrarbe, se queden sin las misas que estaban programadas para este domingo y este lunes por la festividad del Pilar. No hay posibilidad de encontrar un sustituto porque "cada uno de los esta zona llevamos unos cuantos pueblos". Entre los que atiende él se hallan Radiquero, Adahuesca, Buera, Lecina, Bárcabo o Almazorre.
El cura, muy querido entre sus feligreses por su labor como dinamizador espiritual, social y cultural a lo largo de muchos años en este territorio, permanece en su casa, en Alquézar. Aquí se entretiene leyendo y contestando a las numerosas llamadas que recibe, a la espera de que llegue el martes 13 de octubre. Este día tendrá que desplazarse hasta Abiego para hacerse la PCR, que le han prescrito por haber estado en contacto con una persona que ha dado positivo en coronavirus. Hasta conocer el resultado del análisis también deberá permanecer confinado. "No queda otra que paciencia y esperar", comenta.
Según ha explicado, se desplazó hasta Colungo para llevarle la comunión a una señora centenaria a su casa . "Estuve allí ocho o diez minutos y me marche", ha comentado Cabrero. Al día siguiente le comunicaron que la mujer estaba contagiada de covid. A esta se le realizó la PCR porque empezó a encontrarse mal y con síntomas asociados a dicha enfermedad. La cuidadora de la mujer, una trabajadora interina que había tenido unos días libres, también ha dado positivo. Fue la asistenta quién avisó a los vecinos de que la anciana no estaba bien y varios de ellos se acercaron hasta el domicilio de la misma para interesarse por ella.
En esos días se registraron en Colungo cinco casos positivos "y empezaron a ver qué personas podían haber estado por allí". José María Cabrera era una de ellas. "Yo estoy bien, en principio no me siento nada especial", ha comentado. En dicha localidad, además de los que ya tiene confirmación del contagio, hay varios vecinos que están esperando los resultados de las PCR practicadas. Este municipio de la Sierra de Guara es uno de los que se ha quedado sin celebración religiosa del Pilar. La festividad coindice además con el día grande de las fiestas mayores por lo cual se había preparado una misa baturra.
El alcalde de Colungo, Fernando Abadías, ha manifestado que los actos culturales que iban a celebrarse estos días, como la presentación de un libro y un festival de jotas se han suspendido, lo mismo que la misa. La situación se comunicó por el grupo de whatsapp del que forman parte casi todos los vecinos, los que viven en el pueblo y los que acuden los fines de semana. El primer edil también ha apuntado que la señora a la que Cabrero llevó la comunión se encuentra bien.
El brote de Colungo ha tenido un efecto colateral ya que entre los habitantes de esa población que guardan cuarentena está el concejal Javier Cavero, presidente de la Asociación Cultural O Portal d' Acunarda' y guía de la colegiata de Alquézar. En un primer momento se temió por la visitas a este monumento románico en estos días de puente. Afortunadamente, según ha explicado José María Cabrero, se ha podido contratar a una persona que ya trabajó ahí durante el verano y ayudó en Semana Santa. "Por lo menos estos tres días está abierta porque la semana que viene tendremos que poner el cartel de cerrado", ha dicho.
