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La planta de biomasa de Monzón logra la autorización administrativa

El anuncio, publicado este viernes en el BOA, es el último escollo burocrático que daría luz verde a la empresa para ejecutar la obra, una vez conseguida esta declaración solicitada en 2013.

Terrenos adquiridos por Forestalia para su planta de Monzón.
Terrenos adquiridos por Forestalia para su planta de Monzón.
J. L. Pano

La empresa Solmasol, del grupo Forestalia, ha logrado el último trámite para la construcción de su planta de biomasa de 49,5 MW en la localidad oscense de Monzón, tras conseguir del departamento de Industria del Gobierno de Aragón la autorización administrativa. 

El anuncio, publicado este viernes en el BOA, es el último escollo burocrático que daría luz verde a la empresa para ejecutar la obra, una vez conseguida esta declaración solicitada en 2013.

Fuentes de la empresa indican que tras conseguir esta última y definitiva autorización, y a pesar de que la inversión prevista para Monzón se derivó a una planta similar ya en marcha en Bierzo –debido a la presión social de este proyecto, sobre todo por parte de Ecologistas en Acción-, el proyecto ideado para la capital mediocinqueña continúa. Si bien matizan que sigue condicionado y supeditado, en su caso, a una futura adjudicación en una subasta, que no está convocada todavía por parte del Gobierno central. 

Asimismo, indican que Forestalia trabaja con dos proyectos similares al de Monzón en Guardo (Palencia), y está en estudio en Andorra (Teruel).

Cabe recordar que la empresa ya solicitó una prórroga del proyecto, tras culminar el plazo este ejercicio, que fue concedida por el Instituto Aragonés de Gestión Ambiental.

Pese a contar con el beneplácito del anterior equipo de Gobierno de Monzón, las presiones sociales y la judicialización del proceso llevo a este grupo inversor a trasladar el proyecto en la comarca leonesa del Bierzo, en la localidad de Cubillas del Sil, con los derechos energéticos adquiridos en la subasta pública de 2016. En esta, se han invertido 100 millones de euros, trabajan 50 empleados y, según fuentes de la empresa, hay una previsión de empleo indirecto de 400 trabajadores en la producción y transporte de biomasa.

La cercanía del proyecto, previsto en el polígono Paúles, a unos 600 metros del casco urbano, es el principal escollo que esgrimen los detractores de esta iniciativa empresarial, entre ellos Cambiar Monzón y Ecologistas en Acción. Esta última formación llevó a los tribunales la actuación del Ayuntamiento por, a su juicio, licitar y conceder esta actividad sin haber atendido a las exigencias del PGOU. Pese que los tribunales han dado la razón al Ayuntamiento en la tramitación de este expedientes, Ecologistas en Acción ya anunció cuando se concedió una prórroga por parte del Gobierno de Aragón a la empresa su intención de recurrir en los tribunales puesto que consideran que su implantación conllevaría perjuicios en la salud de la población.

De momento el Ayuntamiento de Monzón, presidido por el popular Isaac Claver sigue sin realizar ningún posicionamiento al respecto, pese a que este grupo municipal se mostró partidario de la iniciativa en el pasado mandato.

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