La Guardia Civil rescata a 25 personas en solo cuatro días en la provincia de Huesca

Los grupos de rescate en montaña de la Guardia Civil en la provincia de Huesca han realizado en los últimos cuatro días 15 intervenciones auxiliando a un total de 25 personas, la mayoría por lesiones leves. Más de la mitad de los avisos se recibieron a través del 112 SOS-Aragón y ha vuelto a ser muy importante la labor de los guardas de los refugios dando aviso de inmediato en cuanto tienen noticia de un incidente.

En la madrugada del lunes, 20 de julio, se llevó a cabo el primer rescate por parte del Ereim de Huesca en las proximidades de la localidad de Alberuela de Tubo, donde un vecino de Zaragoza de 37 años había sufrido una lesión en el tobillo, encontrándose en una zona de cortados de roca arenisca. Tuvo que ser porteado campo a través 500 metros y a la espalda por los especialistas de montaña con ayuda de componentes de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil de Sariñena, que tuvieron que salvar un cortado y un desnivel de 40 metros.

Ese mismo día, el Greim de Boltaña junto con la Unidad Aérea de Benasque, rescató ileso a un vecino de Zaragoza, que se encontraba en enriscado en la zona de Cotatuero en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.

Además, el EREIM de Panticosa junto con la Unidad Aérea de la Guardia Civil de Huesca y una sanitaria de 061, auxiliaron a cinco personas de una misma familia de Barcelona, que se encontraban en el Collado de la Gran Facha (Sallent de Gallego), tras haber sufrido uno de ellos un fractura de tobillo. Todos ellos fueron rescatados para evitar que tuvieran que finalizar la actividad de noche, con el consiguiente riesgo.

El martes día 21 de julio, de madrugada, el Ereim de Huesca rescató a cuatro senderistas que se encontraban en al barranco la Peonera (Bierge). Habían realizado una ruta y se habían introducido en el cauce del río, se les había hecho de noche y no tenían iluminación para poder continuar. Dos especialistas, tras 40 minutos de ascenso desde la presa de Bierge, los localizan ilesos. Eran cuatro jóvenes de entre 21 y 22 años, vecinos de Madrid, a los que facilitaron agua y comida, así como frontales de luz y les acompañaron hasta su vehículo.

Por la mañana, el Sereim de Jaca con Unidad Aérea de Huesca y un sanitario de 061, auxiliaron en la Chorrota del Aspe (Aísa) a una senderista francesa con una posible fractura de muñeca y al guía que la acompañaba.

Además, bomberos de Toulouse (Francia), alertaron a medio día que en la zona del glaciar de la Maladeta (Benasque), se encontraba un vecino de Navarra de 52 años que había sufrido una luxación en un hombro. El Greim y la Unidad Aérea de Benasque, junto con un médico de 061, se dirigieron al lugar y tras realizar una primera asistencia médica y evacuaron al herido hasta Benasque.

El miércoles, 22 de julio, el Greim de Boltaña recibió tres avisos en un breve espacio de tiempo. El primer rescate fue un barranquista se había lesionado al saltar en una poza en el Miraval Superior (Puértolas) y al lugar se dirigieron con la Unidad Aérea de Benasque y el médico de 061. Mediante un ciclo de grúa de 37 metros se depositó a los especialistas y al médico, evacuando a un varón francés de 20 años y a su guía también de nacionalidad francesa. El herido fue trasladado al Hospital de Barbastro para valoración de sus lesiones.

El segundo aviso indicaba que en las pozas de Puyarruego (Puértolas), un bañista estaba sufriendo convulsiones. Hasta allí se desplazaron la Unidad Aérea de Benasque y un médico de 061. Cuando localizaron al enfermo, un varón francés de 47 años, había conseguido llegar hasta la zona una ambulancia medicalizada con dos sanitarios, que le evacuaron al hospital de Barbastro.

El último aviso del día para el Greim de Boltaña indicaba que una mujer había sufrido una caída en un terreno inestable en la Cola de Caballo, en el Parque Nacional de Ordesa, produciéndose varias contusiones, una de ellas en la cabeza. Tras localizar a la herida y recibir una primera asistencia, fue evacuada al aparcamiento de la pradera donde fue recogida por una ambulancia que la trasladó al hospital de Barbastro.

Posteriormente, se recibió otro aviso, del guarda de refugio de Bachimaña, indicando que un senderista había sufrido una lesión de tobillo y no podía continuar la marcha. El Ereim de Panticosa y la Unidad Aérea de Huesca con un sanitario de 061 se desplazaron hasta el lugar y evacuaron al herido hasta la zona del balneario de Panticosa y desde allí a un centro médico.

Finalmente, a las 22.00, se recibió un último aviso indicando que dos montañeros belgas de 53 y 54 años, se encontraban en el Contrafuerte del Pico Collarada (Canfranc) agotados y en un lugar de difícil acceso del que no podían salir sin ayuda. Dado que su estado no revestía gravedad y tenían los medios, pasaron la noche allí. A primera hora de la mañana el Sereim de Jaca con el helicóptero de la Unidad Aérea de Huesca se dirigieron al lugar, localizándolos en una zona de cortados con abundante vegetación, teniendo que efectuar tres ciclos de grúa, además de extraer del lugar al perro que les acompañaba. Los montañeros se encontraban ilesos y fueron trasladado hasta Jaca.

Y el jueves, 23 de julio, se llevaron a cabo cuatro rescates, tres de ellos a cargo del Ereim de Panticosa. Junto con Unidad Aérea de Huesca y un sanitario de 061 evacuaron del refugio de Bachimaña (Panticosa) a una vecina de Madrid de 49 años con un esguince en un tobillo. También en Bachimaña tuvieron que auxiliar a un hombre y una mujer, vecinos de Zaragoza, por una indisposición de esta última. El tercer rescate se realizó cerca de las Peñas de Aso, donde se evacuó a un vecino de Huesca de 87 años que se había precipitado por una ladera y presentaba policontusiones con posible rotura de cadera.

El cuarto rescate de este día, lo llevó a cabo el Greim de Boltaña con la Unidad Aérea de Benasque evacuando a un hombre y una mujer, vecinos de Zaragoza, de 58 y 71 años, los cuales se habían quedado enriscados en las inmediaciones del Ibón de Plan, siendo trasladados hasta el refugio de Labasar.