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Graus comienza a trabajar en la futura ampliación de su Casa de la Cultura
La demolición de una vivienda contigua, cedida por la familia de 'Paco el Barbas', permitirá incrementar el espacio para reubicar la Escuela de Música y crear lugares de reunión para colectivos culturales y sociales.
Los trabajos de demolición de una vivienda en el número 7 de la calle del Prior que se están realizando estos días suponen el primer paso para una futura ampliación de la contigua Casa de la Cultura de Graus, proyecto que se demorará varios años pero para el que se están poniendo ya los primeros cimientos.
Así lo reconoce el concejal del equipo de gobierno Javier Salamero, quien señala que la actuación ahora iniciada es "un primer paso" ya previsto en los presupuestos municipales para una ulterior ampliación de este equipamiento cultural y que esta intervención en concreto urgía realizarla cuanto antes por el preocupante estado que presentaba el estado de la casa.
De hecho, los trabajos en curso se iban a iniciar el pasado mes de marzo, cuando tuvieron que ser postergados por el estado de alarma. "Nuestra intención es la de ir buscando fuentes de financiación en próximas anualidades para levantar un nuevo edificio que estará conectado con las actuales dependencias de la Casa de la Cultura y las complementará", señala el edil, muy consciente de que la crisis sanitario-económica provocada por el coronavirus puede demorar varios años la culminación de este proyecto.
La vivienda que se está demoliendo ahora se encuentra adosada parcialmente por la parte de atrás con la Casa de la Cultura, lo que permitirá en un futuro desarrollar sin problemas su ampliación, muy necesaria, por ejemplo, para reubicar con más comodidad a los numerosos alumnos de la exitosa Escuela Municipal de Música y para habilitar distintos espacios de de reunión muy demandados por varios colectivos culturales y sociales.
Residencia de un querido habitante de Graus, Francisco Solanilla –conocido popularmente como 'Paco el Barbas'-, fue cedida al pueblo por sus hermanos y herederos tras su fallecimiento, comprometiéndose el consistorio a dedicarla a fines culturales y sociales. Tras la donación, se realizaron una serie de estudios y análisis exhaustivos sobre la situación estructural del edificio, y tras comprobarse que ésta era bastante precaria, los técnicos recomendaron por razones de seguridad la demolición del edificio y la construcción de uno de nueva planta en el solar de la casa.
