Nieve y lluvias intensas acompañan los primeros días de aislamiento por el coronavirus en Teruel y el Pirineo
El lunes entra una DANA que puede llegar acompañada de precipitaciones de hasta 15 litros en una hora y 20 centímetros de nieve .
En medio de la crisis por el coronavirus y el aislamiento impuesto por el estado de alarma, la Agencia Estatal de Meteorología ha advertido de que el tiempo se va a complicar en las próximas horas, con lluvias intensas y nevadas en el Pirineo y las sierras turolenses, que favorecerán que la gente se quede en casa.
La Dirección General de Interior y Protección Civil acaba de informar de que hay aviso amarillo para este mismo domingo a partir de primera hora de la tarde en Albarracín, Jiloca, Gúdar y Maestrazgo, en Teruel, por fenómenos tormentosos. También en el centro y sur de Huesca, en el Pirineo oscense y en las Cinco Villas. En estas dos últimas zonas, a partir de las 22.00 las precipitaciones pueden ser en forma de nieve.
El empeoramiento continuará mañana, lunes. El aviso amarillo se mantiene durante la madrugada por amplias zonas del sur de Teruel, la Ibérica zaragozana y la ribera del Ebro. También en la provincia de Huesca. Pero además la alerta se eleva al nivel naranja por nevadas durante la próxima madrugada en Albarracín y el Jiloca, Gúdar y el Maestrazgo. Parece que las nevadas serán más intensas en estas zonas del sur de la Comunidad que en el Pirineo y la zona oriental de la provincia de Zaragoza, donde además podrían venir acompañadas de viento.
La Agencia Estatal de Meteorología ha lanzado un aviso especial de fenómenos adversos. Las temperaturas de los últimos días, más altas de lo habitual, van a dejar paso a la entrada de un frente frío atlántico que se extenderá hacia el área mediterránea, con chubascos y tormentas localmente fuertes o muy fuertes en Navarra, Alto Ebro y entorno de los sistemas Ibérico, Central y Pirineos.
El lunes se formará una DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) en el interior peninsular que llevará aparejado un descenso térmico entre notable y extraordinario en gran parte del área peninsular, provocando nevadas copiosas, de más de 20 cm, a partir de unos 800 o 1.000 metros en los sistemas Central, Ibérico y Pirineos, con acumulaciones mayores en cotas altas.
