los efectos de la borrasca elsa
El temporal golpea al Pirineo, con rachas de 168 km/h y hasta 145 litros de lluvia
La Confederación Hidrográfica del Ebro avisó de posibles crecidas en los ríos. En Noales (Montanuy) se ha desbordado el río Baliera, pero sin causar daños.
El Pirineo ha vivido una noche infernal en algunos puntos debido al paso de la borrrasca Elsa, que ha dejado rachas de viento de hasta 168 kilómetros por hora en Cerler y 145 litros de agua por metro cuadrado en Monte Perdido, en el valle de Pineta (Bielsa). Esto se ha notado en los ríos, que han experimentado una crecida, como ya advirtió la Confederación Hidrográfica del Ebro, y también ha ocasionado algunos desprendimientos en las carreteras.
La estación meteorológica de Cerler-Cogulla ha registrado el récord de velocidad máxima de viento en España, con 109 km/h. También ha dado la rachas más fuertes (168 km/h) y la temperatura más bajas (-1,3 grados) del país. Pero no ha sido algo excepcional, ya que igualmente se han medido rachas por encima de los 100 km/h en Panticosa (131 km/h) Tarazona (116) , Bello (114) y Mosqueruela (104).
Pero además, la borrasca ha dejado cantidades muy importantes de lluvia en numerosas localidades, hasta el punto de que la alerta naranja se ha prolongado hasta las 12.00. En Panticosa se han contabilizado 82 litros por metro cuadrado y 80 en Biescas. Las precipitaciones han sido igualmente muy destacadas en Bielsa (67) y Canfranc (56).
Pero fuera de los núcleos poblados, los puntos de aforo de la Confederación Hidrográfica del Ebro han superado estos registros. El situado en Monte Perdido, en el valle de Pineta, arrojaba a las 9.00 una precipitación acumulada de 145 litros. Y el de Candanchú, 142.
Las intensas lluvias han provocado desprendimientos en algunas carreteras. Al menos hay afectadas dos vías secundarias, en Acumuer y Barós. La carretera entre Ulle y Barós, en la comarca de la Jacetania, quedó limpia en torno a las dos de la tarde. Permanecía cortada al tráfico desde las 7.30 de este viernes por un desprendimiento de tierra debido a la intensa lluvia y viento de las últimas horas. El Servicio de Emergencias del Ayuntamiento de Jaca ha recibido el aviso y ha acudido al lugar, pero esta carretera depende de la Diputación Provincial de Huesca, que ha enviado una máquina para limpiar la vía. Ha sido la única incidencia que ha atendido el citado servicio en las últimas horas.
En la comarca vecina del Alto Gállego no se han producido incidencias graves por el temporal. En la A-136, en el km 2,7 en Biescas, hay un pequeño desprendimiento que afecta a un carril.
Los ríos también han experimentado crecidas importantes. En el municipio de Montanuy, el Baliera se ha desbordado a la altura de la localidad de Noales, aunque no ha provocado daños porque el pueblo está a mayor altura.
La Confederación Hidrográfica del Ebro ya había advertido el jueves de posibles crecidas "de carácter extraordinario" en afluentes pirenaicos como el Aragón, Gállego, Cinca, Ésera, Noguera Pallaresa, Noguera Ribagorzana y Garona. En estas zonas, en gran parte serían absorbidas y laminadas por los embalses pirenaicos.
Otro efecto, provocado por el viento, ha sido el cierre de algunas estaciones de esquí, como las de Formigal y Candanchú.
