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Desciende la cifra de bañistas en Bierge el tercer año con tasa
La zona de la presa del Alcanadre ha recibido a 8.500 personas hasta final de julio, 700 menos que el verano pasado.
El Salto de Bierge afronta su tercer verano consecutivo tras la regulación del acceso a la zona de baño de esta presa hidráulica en el río Alcanadre con un balance satisfactorio, según realiza el alcalde del municipio, César Sánchez.
La tercera temporada con acceso regulado a la zona de baño de la badina superior mediante la tasa de 2 euros comenzó el 15 de junio y hasta el final de julio se ha registrado una asistencia de 8.500 personas. La cifra, es inferior al mismo periodo de 2018, donde se contabilizó el acceso de 9.200 personas.
Los fines de semana de julio han sido los de mayor ocupación, superando los 400 usuarios diarios, siempre teniendo en cuenta que existe un límite establecido en 250 personas al mismo tiempo. Así, el cartel de aforo completo ha debido colgarse en varias ocasiones, pero la rotación es constante, por lo que no ha habido grandes esperas.
La situación es de normalidad, debido a la contratación de personal y de una empresa de seguridad por parte del Ayuntamiento de Bierge para evitar que se produzcan episodios de actos vandálicos o comportamientos incívicos, como los registrados el pasado verano y que llevaron a optar por esta medida preventiva. Asimismo, la entrada de autobuses hasta el puente del Alcanadre que da acceso a la badina ya no se produce, por lo que la circulación por la zona es normal, al no atascar la carretera.
Por otro lado, la Comarca de Somontano continúa con la campaña de sensibilización en Facebook y Twitter, a través de las cuentas de El Salto de Bierge, con la finalidad de informar de la regulación y evitar comportamientos que afecten al entorno natural y al resto de usuarios.
Algunas de las normas pasan por la prohibición de saltar desde la presa y acceder a la badina inferior, aparcar en las zonas debidamente habilitadas y no en el arcén de la carretera, la prohibición de que los autobuses paren en la zona de la central o llevar los perros atados, entre otras. Toda la información de esta regulación se puede encontrar en la web turismosomontano.es.
Salto de Pozán de Vero
Uno de los motivos de ese descenso de bañistas al Salto de Bierge este año podría estar en que los asistentes han optado por otros parajes naturales gratuitos y cercanos. Uno de ellos es la piscina natural del azud de Pozán de Vero, entre esta localidad y Castillazuelo. Es una zona de baño más reducida al salto de Bierge pero también con un encanto que podría perderse en caso de masificación. Coincidiendo con la regulación del Salto de Bierge, sí que los bañistas han ocasionado problemas al aparcar sus vehículos en caminos cortando el acceso a fincas particulares.
