accidentes de montaña
Extravíos, tropiezos o insolaciones en otro agitado fin de semana para los equipos de rescate
La Guardia Civil ha realizado en los últimos días once rescates, la mayoría por lesiones en el tobillo y sin heridos de gravedad.
Desde que comenzó el buen tiempo, los equipos de rescate de la Guardia Civil han realizado ya más de 40 operaciones de salvamento en el Pirineo y la sierra de Guara. Solo en los últimos días, los helicópteros con base en Benasque y Huesca y los especialistas de los cinco grupos de montaña que hay en la provincia han realizado 11 auxilios. Ha habido extravíos, tropiezos con lesiones en los tobillos, insolaciones y hasta una senderista que se negó a ser atendida. Afortunadamente, ninguno tenía lesiones de gravedad.
El rescate más llamativo es el realizado el sábado por la mañana, cuando se localizó a un montañero alemán de 66 años herido en Benasque que llevaba cuatro días perdido cuya desaparición no había denunciado nadie, ya que realizaba una travesía en solitario por el GR 11. Pero la última tanda de salvamentos de la que ha informado la Guardia Civil arranca el pasado martes, con un senderista de la misma nacionalidad extraviado en Aísa. En la zona había niebla muy cerrada y le daba miedo continuar la marcha, ya que no lograba ver nada y había encontrado varios neveros. Antes de que llegara el servicio de rescate de Jaca lo localizó un grupo de montañeros que lo ayudó a bajar por las pistas de la estación de Candanchú.
Solo un día después, los socorristas se encontraron con un caso poco habitual. Un senderista francés de 67 años que iba por la localidad de Betesa (municipio de Arén) llamó al 112 para informar de que su acompañante, una mujer de 65, se encontraba mareada y decía cosas sin sentido. Se activó al Greim y el helicóptero de Benasque y un médico del 061, pero no pudieron atenderla.
Según ha explicado la Guardia Civil, al acercarse el médico para realizar una primera valoración, "comenzó a realizar aspavientos con actitud agresiva, indicando que no necesitaba nada y que bajaba sola". Era imposible subirla a la aeronave y denegó expresamente la atención médica. Entonces se pensó que el Greim la acompaña hasta su vehículo para intentar allí la valoración médica, pero volvió a rechazarlo. Finalmente el operativo decidió abandonar el lugar, aconsejando a su acompañante que se pusiera en contacto con el 112 o acudiese a un centro de salud.
En otro de los rescates se evacuó a una madrileña de 37 años que estaba incosciente por una posible insolación en el refugio de la Renclusa (Benasque). Un médico del 061 le practicó los primeros auxilios y fue evacuada por la unidad aérea a la helisuperficie de esa localidad y recogida por un familiar.
Un esguince de tobillo motivó en la noche del viernes al sábado un prolongado operativo en el municipio de Ansó para sacar de allí a una senderista zaragozana de 66 años. Había sufrido una caída, y cuando se comunicó el accidente ya era casi de noche. El equipo de Jaca ya preveía que el rescate sería terrestre, dadas las horas, y en camilla. Al llegar hasta donde estaba la mujer, con su marido y su hijo, se la hidrató e inmovilizó el tobillo, facilitándole además ropa de abrigo. Hubo que portear la camilla dos horas por terreno inestable y pendiente hasta donde la familia había dejado su vehículo. Decidieron ir por sus propios medios al hospital de Jaca.
Horas después, personal de la misma unidad de Jaca tuvo que portear en camilla a un senderista zaragozano de 51 años, también con una lesión de tobillo. Había resbalado por una pendiente cerca del Coll de Ladrones, en Canfranc. En este caso, al paso por varios tramos verticales, hubo que asegurar la camilla con cuerdas.
Hubo otros tres rescatados con lesiones en los tobillos: una madrileña de 53 años en Benasque, una alemana de 46 años en Montanuy y una vecina de Soria de 48 años en Canfranc. Además, el equipo de Huesca atendió a una barcelonesa de 27 años accidentada en un barranco en Bierge que tenía una fractura abierta en una pierna y que iba con un grupo no guiado, según precisó la Guardia Civil.
Este fin de semana también se ha acudido en auxilio de tres ciudadanos franceses vecinos de Baldellou, entre ellos un menor, extraviados en el embalse de Santa Ana. Uno de ellos tenía una lesión de rodilla que, según diagnosticó el médico resultó ser un esguince leve, recomendándole simplemente cuidados domiciliarios. El helicóptero de Benasque los trasladó hasta esa localidad.
