barbastro

Barbastro despide al agitador sociocultural Joaquín Coll

El acto de despedida para el ex concejal del PSOE tendrá lugar en la Catedral a las 18.00.

Joaquín Coll en una fiesta del Crespillo, segundo por la derecha, junto a un hombre de camisa azul.
Joaquín Coll en una fiesta del Crespillo, segundo por la derecha, junto a un hombre de camisa azul.
HA

Definir a Joaquín Coll con un solo atributo es complicado. Escritor, activista cultural y social, defensor del patrimonio, gastrónomo, antropólogo, responsable de ferias y de plataformas en defensa del territorio, concejal, sindicalista… Quizás habría que acuñar para su persona un término como que sustituya al tan manido ‘hombre renacentista’. El caso es que Barbastro perdió ayer a una buena persona, a un ser entrañable en el panorama social de la capital del Somontano.

Era habitual verlo frecuentar con cuadrillas de amigos y de parejas las rondas de bares por las tardes, quizás por eso extrañó a muchos su muerte. Pero la procesión iba por dentro y ayer miércoles en Zaragoza Joaquín no pudo superar una insuficiencia cardiaca. Y eso que como decía esta mañana en el tanatorio una de sus sobrinas "tenía un corazón muy grande".

Joaquín Coll nació en Lascellas en 1944, descendiente de una saga de importantes relojeros artesanos, cuya historia plasmó en un estudio y libro titulado ‘La relojería de Lascellas’. Fue uno de sus muchos escritos ya que además publicó, en su vertiente de gastrónomo, el imprescindible manual para todo buen amante de la cocina ‘Manjares del Somontano’ y un estudio antropológico sobre ‘El crespillo’, para la revista Temas del Instituto Aragonés de Antropología. Los crespillos eran una de sus pasiones y no fallaba ningún año en uno de los hornillos de esta fiesta declarada de interés turístico regional. Su pasión literaria y su gran sentido del humor le llevó a presidir el jurado de poesía del premio ‘La mueca del pícaro’, de relatos hiperbreves de humor, que convoca el Ayuntamiento de Barbastro.

Sus inquietudes sociales y culturales estallaron en la Transición donde junto a un grupo de entusiastas del patrimonio y activistas políticos fundaron la Asociación Cultural del Somontano (ACUSO) para preservar vestigios históricos de la ciudad o promover la implantación del Hospital de Barbastro, donde Joaquín trabajó hasta su jubilación. Su compromiso más reciente le llevó a presidir la plataforma de Amigos del Ferrocarril del Alto Aragón en un intento fallido para que Barbastro recuperar la conexión por tren. Asimismo formó parte del Centro de Estudios del Somontano.

Fue asimismo concejal por el PSOE en distintas áreas, destacando la de Cultura. Le tocó dirigir la feria FEMARC, ahora FERMA, y fue uno de los primeros sindicalistas de la incipiente UGT en Barbastro.

También ha sido notable su trayectoria ligada a los medios de comunicación. Fue editor del periódico independiente Zimbel, ya desaparecido, y hasta la fecha articulista habitual de El Cruzado Aragonés. También publicó en el boletín de la SMA y participaba en tertulias radiofónicas en la SER.

Tras conocer su muerte, el tanatorio se ha llenado esta mañana de amigos y familiares que han querido dar el último adiós. El ex alcalde socialista Antonio Cosculluela, la consejera en funciones de Derechos Sociales y Ciudadanía del Gobierno de Aragón, María Victoria Broto, el etnógrafo Severino Pallaruelo, representantes de la UNED, del Hospital, del tejido socio empresarial de la ciudad y numerosos vecinos que destacaban su bonhomía.

Esta tarde a las 18.00 habrá un acto de despedida en la Catedral.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión