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Ingresa en prisión por presuntos abusos a varios menores un guardia civil que daba clases de inglés en Barbastro
El agente, destinado en Monzón, impartía extraescolares en dos colegios de la capital del Somontano y también era entrenador de un club de baloncesto.
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 2 de Barbastro ha enviado este jueves a la prisión de Zuera, como presunto autor de delitos de abusos sexuales a varios menores de edad, a un agente de la Guardia Civil destinado en Monzón pero que también ejercía como profesor de inglés dando clases extraescolares en dos colegios públicos de Barbastro.
Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Aragón han confirmado que el implicado es un guardia civil de 48 años de edad y que los hechos que han dado lugar a la apertura de diligencias ocurrieron en la ciudad de Barbastro, lugar de residencia del detenido, donde supuestamente podría haber varios menores víctimas de posibles abusos.
El agente fue arrestado al parecer el pasado lunes por miembros del mismo cuerpo de la Guardia Civil aunque no ha sido hasta este jueves por la mañana cuando ha pasado a disposición judicial para prestar declaración por los hechos investigados. Tras ello, la juez ha ordenado su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza. Por el momento, en la causa no hay acusaciones particulares y solo están personados el Ministerio Fiscal y el letrado de la defensa.
Desde la Comandancia de la Guardia Civil de Huesca no han ofrecido ninguna información sobre los hechos argumentando que la juez ha decretado el secreto de las actuaciones.
El detenido llevaba varios años impartiendo clases extraescolares de inglés en dos colegios de Barbastro. Este curso daba clases de 15.00 a 16.00 en un centro, y de 16.30 a 17.00 en el otro colegio, de lunes a viernes. Las clases habían transcurrido con normalidad hasta este pasado viernes, la última vez que se le vio por las aulas como de costumbre.
Tras conocer la detención, los equipos directivos de los dos centros educativos comunicaron a los responsables de las asociaciones de madres y padres de alumnos que debido a un asunto personal, este profesor no iba a poder impartir ya las clases de inglés. Y es que las amypas son las encargadas de contratar las actividades extraescolares.
La noticia del arresto de este guardia civil, que tenía autorización de la Benemérita para ejercer esta segunda actividad impartiendo clases extraescolares, ha conmocionado a la comunidad educativa y también a la deportiva, al tratarse de una persona muy conocida y apreciada en Barbastro por su intensa actividad en el ámbito del deporte y su promoción entre los niños.
Todas las fuentes consultadas, tanto del ámbito educativo, como del club de baloncesto donde también ejercía como entrenador y promotor de encuentros deportivos, se han mostrado "sorprendidas" por lo acontecido. Y es que lo han calificado como una persona muy social, correcta en su trato y con una gran dedicación por el mundo de la educación y la promoción del deporte entre los escolares.
Es el segundo caso de abusos sexuales a menores ocurrido en Barbastro en pocos meses. El pasado septiembre, la Guardia Civil también detuvo a un hombre por un presunto abuso a una joven de 17 años ocurrido en las inmediaciones del pabellón Interpeñas, en el recinto ferial, la primera noche de las fiestas. El detenido, en libertad con cargos, no puede acercarse a la víctima.
Los últimos datos de la Fiscalía indican que en la provincia de Huesca se abrieron en 2017 un total de ocho diligencias por presuntos delitos de abusos sexuales a menores de 16 años, seis más que el año anterior, y se dictó una medida de prisión. Además, hubo otra denuncia por una agresión sexual, un caso de corrupción de menores y otro de utilización de jóvenes de menos de 18 años con fines pornográficos.
El Código Penal establece en su artículo 183 que será castigado con una pena de prisión de dos a seis años el que realizare actos de carácter sexual con un menor de 16 años, como responsable de un delito de abuso sexual. Y si los hechos se cometieran empleando violencia o intimidación, el autor sería castigado en ese caso por un delito de agresión sexual a un menor con la pena de cinco a diez años de prisión.
