El alegato viral de un ganadero sobre el mundo rural y los urbanitas

"Suerte, salud y larga vida al mundo rural". Con esta frase escrita en su muro de Facebook, Koke Sanz Aznar, un ganadero y hostelero de Sarvisé (Broto), presenta el vídeo que ha colgado y que constituye un alegato en defensa del medio rural. En él cuestiona las normas impuestas desde los despachos de la ciudad. Lo grabó un amigo con el teléfono móvil y desde el lunes por la noche acumula 10.000 reproducciones. "Fue algo improvisado, no sabía que iba a tener semejante repercusión". 

Una anécdota ocurrida en su pueblo hace dos semanas fue la gota que colmó el vaso de su paciencia. "Aquí los perros van sueltos, que es como están bien, no encerrados en un piso. Llegaron dos turistas y debieron pensar que estaba abandonado. Se lo llevaron a una protectora y esta llamó al dueño. Tuvo que ir a buscarlo a Jaca y pagar 40 euros para sacarlo", explica Koke Sanz.    

El vídeo comienza con una referencia a la movilización de la España vaciada. "Ya era hora de que la gente se diera cuenta de que con el mundo rural hay un problema", dice en la grabación, y lanza un mensaje de advertencia sobre la brecha, cada día más grande, entre el mundo rural y el mundo urbano. "Tenemos nuestra forma de vida y nuestras costumbres y nos encanta que venga todo el mundo. De hecho, vivimos del turismo. Yo soy ganadero y hostelero y la mayoría de la gente tiene dos dedicaciones porque solo con una es muy complicado. El problema es que nos vienen a cambiar nuestras formas de vida, nuestra cultura, a ver cómo tenemos que cuidar a los animales o enseñarnos cómo tenemos que hacer la lena", señala en la grabación.  

Pone como ejemplo que para hacer leña en su propia finca debe pedir un permiso, "y solo nos dejan hacerla de 20 centímetros". En su opinión, esto es un reflejo del "desconocimiento tan grande" que existe cuando se redactan las normas con una perspectiva solo urbana. Lo mismo se puede decir, añade, sobre cómo se cuida en los pueblos a los animales. "Nosotros somos realmente los ecologistas, naturalistas y sobre todo animalistas, porque vivimos de ellos y es algo que hemos heredado, pero ahora parece que todo el mundo nos da clases de todo".   

También destaca la paradoja de que mientras hay 25 o 30 coches de alta gama para los desplazamientos de los profesionales que trabajan en los servicios de medio ambiente, el centro de salud que cubre más de 20 pueblos tiene "un Vitara y viejo", con el que tiene que circular por carreteras donde en invierno hay nieve. "Todo esto está muy bien, mientras estuviera en consonancia".  

Del mensaje no se libran los políticos, que "se olvidan de las necesidades reales de los municipios", aunque reconoce que algunos realmente se dedican a su pueblo. Les pide un acercamiento a los problemas reales del medio rural.

La puntilla son los osos y lobos, que perjudican a la ganadería y al turismo. Si la población de estos animales va en aumento, advierte, "que nos digan cómo tenemos que vivir, porque no podemos seguir haciéndolo con nuestra forma tradicional". 

koke Sanz se muestra sorprendido por la amplia difusión del vídeo que improvisó, en el que, dice, ha intentado expresar su preocupación por la distancia cada vez más grandes que hay entre el mundo rural y el urbano. El hecho de que se esté compartiendo de forma masiva, señala, es porque "la gente lo sufre".