La Fundación Rey Ardid impulsa una residencia de ancianos con 160 plazas 

La oferta de plazas de residencias de mayores en Huesca se verá incrementada dentro de año y medio. Es el plazo para la construcción del centro que impulsan las empresas Adiante, ICR, GRM y la Fundación Rey Ardid, que será la encargada de su gestión. Este martes uno de marzo se ha colocado la primera piedra de un proyecto que supondrá una inversión de 8,5 millones de euros y que cuenta con la financiación de la entidad de referencia en banca ética y sostenible, Triodos Bank. Las obras empezarán en abril.

La nueva residencia ofrecerá un total de 160 plazas y otras 30 de centro de día en 6.300 metros cuadrados, con posibilidad de ampliación en una segunda fase hasta 10.500 m2. Su construcción conllevará la contratación de 90 personas y cuando esté funcionando creará 75 empleos. Se edificará en la carretera de Sangarrén, justo antes de la Residencia Ciudad de Huesca y del centro de Aspace.   

El presidente de la Fundación Rey Ardid, Alfonso Vicente, ha señalado que la elección de Huesca para llevar a cabo este proyecto obedece a que las administraciones de la ciudad y la provincia "nos apoyan y creen en lo social". Ha recordado que este territorio, la entidad gestiona ya una residencia en Almudévar y otra en Gurrea de Gállego, además del Centro de Día Casa Aísa en la capital oscense, "nuestro buque insignia".  "Con este centro se responde a una demanda planteada por la población de mayor edad no solo en la ciudad sino también en el Alto Aragón y está será una residencia modelo", ha añadido.  

​El alcalde de Huesca, Luis Felipe, ha destacado que las administraciones "tendrían difícil" responder a las necesidades sociales si no fuera por las asociaciones que trabajan en el Tercer Sector. "Huesca es una ciudad más inclusiva y tiene un sello social", ha apuntado. Además, ha resaltado la inversión y los empleos que supondrá tanto la construcción del edificio como su funcionamiento. La consejera de Ciudadanía y Servicios Sociales, María Victoria Broto, ha señalado que "el Gobierno de Aragón siempre apuesta por residencias de máxima calidad y con los servicios más adecuados, y esta será una de ellas". La DGA concertará plazas también con este centro.

El centro contará con servicios generales de cocina, lavandería, sala de estar, televisión.... y habrá, además, un trabajador social, consulta médica y de enfermería, servicio de podología y peluquería, fisioterapia y gimnasio. El conjunto tendrá un amplio jardín y zonas de paseos en su exterior. Las instalaciones, totalmente accesibles, se distribuyen en unidades de convivencia similares al propio hogar para que los usuarios puedan mantener la máxima autonomía y evitar traslados innecesarios.

Una de las novedades de este nuevo centro es la distribución de las estancias de forma que cada planta cuenta con núcleos para los servicios generales como fisioterapia, comedor o zona de estar. Así, se puede trabajar en cada planta de forma independiente y aislada del resto del edificio y se evita el traslado de los usuarios facilitando su autonomía, orientación y comodidad.