El Félix Rodríguez de la Fuente aragonés vive en Chibluco, es youtuber y hace una tortilla de lujo
Este oscense siempre será recordado como 'El pastor de buitres' pero también es fotógrafo y un 'influencer' de la naturaleza de la zona.
Si alguna vez la vida te lleva a hacer noche en Chibluco, procura que sea un día en el que echen algún partido por la tele. No porque haya especial devoción en este pueblo por el fútbol, sino porque es la excusa para que sus vecinos se reúnan en el club social para una cena de alforja a la que los visitantes están más que invitados.
Juan, el propietario del alojamiento de turismo rural Casa Lino, te invita a pasar y a conocer a sus vecinos. Son 14 los que viven en este núcleo a las puertas de la Sierra de Guara así que en realidad, más que un pueblo, forman una especie de familia y el club social hace las veces de salón de casa. Allí, a parte de una mesa corrida y un televisor, hay una cocina en la que un lugareño elabora una tortilla con los huevos del corral. Mientras, Juan prepara el pan y la torteta y otro amigo te tiende la bota de vino. En la esquina, un ordenador de mesa con conexión a internet permite a estos vecinos de la Hoya profundizar en sus intereses y compartir sus pasiones con el mundo. Si vas sin prisas y dispuesto a escuchar descubrirás que no son pocas y que en algunos casos estás ante verdaderas eminencias.
La de Juan son los senderos y las rutas que permiten descubrir su territorio. Tan pronto te indica cómo subir a la cima de uno de los mallos del Salto Roldán, como te describe todas las opciones senderistas desde el embalse de Vadiello o te diseña una ruta para llegar de Huesca a Ordesa en bicicleta de montaña. Se sabe de memoria hasta en qué tramos las sendas se vuelven no ciclables.
Pastor de buitres, fotógrafo y youtuber
La conversación fluye, una cosa lleva a la otra y de repente descubres que Miguel Ángel Bueno, el que hace de cocinero, es (o fue) 'El pastor de buitres' que durante nueve años alimentaba dos veces por semana a cerca de 600 buitres a las afueras de su pueblo. Quizás hayas visto alguna vez la foto de un oscense desnudo rodeado de buitres leonados. Era Miguel Ángel. Al final los cables de alta tensión obligaron a trasladar la actividad a un muladar autorizado pero la experiencia sirvió para que Miguel Ángel lo aprendiera todo acerca de los hábitos de los buitres que sobrevuelan los mallos de la zona.
Pero no solo de buitres sabe este vecino de Chibluco. Si se sienta ante el ordenador te enseñará todos los blogs que gestiona sobre fotografía y naturaleza. Ahí donde lo ves, podría ser el Félix Rodríguez de la Fuente del prepirineo aragonés. Se ríe cuando se lo dices, pero el año pasado se abrió también un canal de Youtube y ahí comparte algunos de sus momentos de interacción con toda clase de animales. Lo mismo una mariposa, que un quebrantahuesos, una golondrina o un par de garduñas. Todos los días publica una entrada en uno de sus tres blogs: una fotografía y un comentario sobre las especies de fauna y flora con las que se topa en su día a día. Los consultan cerca de 2.000 personas diarias y ya acumula más de 23,6 millones de visitas.
"¿Viajas mucho para encontrar todas estas cosas?" Se ríe. "Vivo en un paraíso inigualable. Aquí coexisten varios ecosistemas y hay cosas que no se ven en ninguna otra parte", comenta convencido este gran explorador de la Hoya de Huesca, de la Sierra de Guara y del prepirineo en general. Como muestra un botón. Miguel Ángel encontró un tipo de orquídea ibérica que nunca nadie había registrado en Huesca, la limodorum trabutianum. Él sospechó enseguida que había descubierto algo relevante y se lanzó a enviar emails a expertos para constatarlo. El Instituto Pirenaico de Ecología le confirmó el hallazgo, y su foto pasó a ilustrar el Atlas de la Flora de Aragón.
La evolución del alimoche
También, dice, es testigo privilegiado de la evolución del alimoche. En uno de los documentales de Félix Rodríguez de la Fuente se muestra cómo estas aves suelen apañárselas para romper los huevos de avestruz. Son capaces de pasar horas seleccionando piedras que después utilizan como proyectil para lanzarlas contra el huevo con el objetivo para mellar la cáscara. Siempre actúan así. Es algo innato. Pero este observador vecino de la Sierra de Guara cuenta con fascinación cómo captó el momento en el que un alimoche joven utilizaba la piedra no como proyectil, sino como martillo, y golpeaba con ella una y otra vez la cáscara hasta partirla. "Nunca antes lo había visto, están evolucionando y está pasando aquí" cuenta maravillado.
Y así el árbitro toca el silbato y a nadie le importa lo más mínimo el resultado del partido, pues nadie miraba la pantalla. Otros vecinos han ido entrando y saliendo mientras el vino bajaba y la torteta desaparecía. Por la mañana, Juan se levanta temprano para hacer café y tostadas y ya ha tenido tiempo de pensar nuevas rutas que proponerte vayas a pie, en coche o en bicicleta.
Es domingo y hoy habrá nietos que vengan a comer así que el sonido del balón volverá a llenar de nuevo la plaza del pueblo. Los lunes todo vuelve a la normalidad y los vecinos de Chibluco se entregan de vuelta a sus aficiones: a la fotografía, la naturaleza, los mapas y las rutas. Todo lo que valga para conocer un territorio que ahora ya está lleno de almendros en flor y que sus habitantes definen una y otra vez como "un paraíso" o "una maravilla".
