Portalet sigue cerrado y el hielo y la nieve provocan restricciones en una veintena de carreteras

El paso a Francia está interrumpido por el riesgo de avalanchas en el vecino de país, una situación que se podría mantener hasta el sábado. Hay ventisqueros de 6 metros de alto.

Una pala cargadora se abre paso por la nieve
Una pala cargadora se abre paso por la nieve
Espacio Portalet

El temporal siguió complicando este jueves la circulación en una veintena de carreteras del Pirineo y la provincia de Teruel. Sin embargo, la situación mejoró respecto al miércoles. El puerto de Monrepós amaneció limpio, aunque eran necesarias las cadenas y estaba prohibida la circulación a los vehículos pesados desde Jaca y Sabiñánigo hacia los distintos valles por carreteras como la A-136, con limitaciones desde Biescas a Formigal; o la N-330 hacia Canfranc.

El único tramo que se mantiene cerrado es el acceso a Francia por el Portalet (A-136) debido al peligro de aludes en el país vecino, que es máximo, a la espera de que amaine el viento y se puedan desencadenar avalanchas con un helicóptero. Hasta el viernes o sábado seguirá esta situación. Según fuentes del Espacio Portalet, en la zona ha caído más de un metro de nieve, pero hay ventisqueros de casi 6 metros.

El tramo que sí se ha podido abrir ha sido el acceso al balneario de Panticosa, una vez limpia la calzada y después de que los nivólogos comprobaran que el itinerario era seguro. Allí permanecían aisladas 200 personas desde el miércoles. También vuelve a circularse por el puerto de Somport, en la N-330a.

El Gobierno de Aragón recomienda precaución por la presencia de nieve, pero también por la formación de placas de hielo. A última hora se mantenían restricciones para circular debido al hielo, con prohibición para camiones y articulados, en Capella (A-1605), Benasque (A-139), Panticosa (A-2606) o Salinas de Bielsa (A-2609), en el Pirineo; y en Villarroya de los Pinares (A-226), en Teruel. Otras carreteras se veían igualmente afectadas por la obligatoriedad de usar cadenas.

Las dificultades en la red viaria del Pirineo han provocado la suspensión de 11 rutas escolares y otras cuatro parcialmente, con 185 alumnos afectados. En el Sobrarbe, salieron todas las rutas, pero debido al hielo no se pudo acceder a ocho núcleos. En Teruel, 80 estudiantes se quedaron sin clase. Una de las rutas más afectadas fue la del Pobo y Cedrillas, con 30 niños.

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