La empresa Interovo, ubicada en Grañén (Huesca), ha continuado su actividad este lunes, después de que este domingo se hayan calcinado un total de 20.000 gallinas ponedoras. En concreto, el fuego ha afectado a una de las cinco naves de gallinas.

El incendio quedó sofocado tras tres horas y sus causas se desconocen. Afortunadamente, no hubo que lamentar daños personales, ya que los 14 trabajadores que en el momento se encontraban en el interior de la empresa resultaron ilesos después de ser evacuados. La empresa tiene capacidad para 175.000 gallinas ponedoras.

El alcalde de Grañén, Carlos Sampériz, ha informado de que este lunes la fábrica continúa con su actividad para no paralizar la producción de esta empresa que "es muy sólida" y cuenta con "un modelo de desarrollo muy consolidado".

De hecho, ha explicado que "el daño que se produjo este domingo suponía un 15% de su material de producción". El edil ha recalcado que "es una empresa que tiene que seguir trabajando y están trabajando para que la producción no se detenga".

Asimismo, ha trasladado a la empresa todo el apoyo y ayuda que requiera del Ayuntamiento de la localidad y ha señalado el amplio calado que la misma tiene en el entorno local. En este sentido, ha dicho que "como cualquier otra empresa su principal activo son las personas y esto lo llevan por bandera y cuentan en su plantilla con muchas personas del medio local".

Para Sampériz es muy importante esa repercusión en la zona "tanto en cuanto a los trabajos directos como a los indirectos que la actividad genera". En total, la empresa da trabajo a 112 personas.

Esta empresa pertenece al grupo holandés Interovo Egg Group, que es líder del sector de ovoproductos. Interovo abrió la fábrica en Grañén en 2007 y procesa más de un millón de huevos al día.