Los futuros médicos de rescate se entrenan en las cuevas de Villanúa

Los alumnos del Máster de Medicina de Urgencia y Rescate en Montaña de la Universidad de Zaragoza realizan estos días las prácticas de espeleología

Simulacro de accidente en la cavidad de Esjamundo
Simulacro de accidente en la cavidad de Esjamundo
Ayuntamiento de Villanúa

Villanúa es famosa por su espectacular cueva de las Guixas, pero no son las únicas cavidades subterráneas del municipio. Precisamente en otras dos, las de Esjamundo y de Esteban Felipe, están realizando estos días sus prácticas los futuros médicos y enfermeros del servicio sanitario de rescate en montaña. La explotación turística de la primera y el hecho de que las segundas se adapten mejor por su configuración al curso de aprendizaje han motivado su elección para impartir la asignatura de Espeleología del máster de Medicina de Urgencia y Rescate en Montaña de la Universidad de Zaragoza.

Según el Ayuntamiento, además de su tradición subterránea, está la escuela de escalada y sus instalaciones y equipamientos, lo que explica que la localidad vuelva ser la sede, por segundo año consecutivo, de la asignatura. El programa, con sesiones teóricas y prácticas, comenzó el pasado fin de semana, 11, 12 y 13 de mayo, con cerca de una veintena de alumnos, médicos y enfermeras, y continuará el próximo sábado y domingo, 19 y 20 de mayo, con el objetivo de formar a los participantes para que puedan integrarse en grupos de rescate medicalizado.

En el centro de interpretación se imparten las clases teóricas, y las cuevas "son ideales" para realizar las pruebas de espeleología. Además, "cuenta con una escuela de escalada idónea para la práctica de técnica de cuerda, y con un magnífico acceso desde Huesca e instalaciones hosteleras, para los alojamientos y comidas”, señala José Luis Villarroel, responsable del máster de la Universidad de Zaragoza.

La asignatura Espeleología está siendo impartida por profesores de la Escuela Aragonesa de Espeleología, desarrollando el programa teórico en la sala audiovisual del Centro de Interpretación Subterránea, que el Ayuntamiento de Villanúa ha puesto a disposición de la Universidad. La sección práctica, por su parte, se está realizando en las paredes de entrenamiento situadas en el Camino de Santiago, en dirección a Canfranc, y en las cuevas de Esjamundo y de Esteban Felipe.

El curso cuenta con la participación de Diego Dulanto, médico anestesiólogo en el hospital de Basurto (Vizcaya), y uno de los más prestigiosos médicos de rescate subterráneo en España, además de presidente de la Sociedad Española de Medicina y Auxilio en Cavidades, mientras que los aspectos geológicos son impartidos por José Antonio Cuchí, profesor titular de la Universidad de Zaragoza. La coordinación corresponde a Fernando Caro, coordinador del Espeleosocorro Aragonés (ESA) e instructor de la Escuela Aragonesa de Espeleología.

El máster se retomó en 2017, después de que estos estudios fueran interrumpidos por el Gobierno de Aragón en 2013 por falta de fondos tras 17 ediciones en las que había formado a casi 500 profesionales. Este paréntesis ponía en riesgo el relevo de los profesionales, por lo que el campus de Huesca consiguió relanzarlo con la colaboración de las federaciones de montaña y espeleología, los grupos de rescate de la Guardia Civil, el Gobierno de Aragón, la Diputación Provincial, el Ayuntamiento de Huesca y Aramón.

Se matricularon 15 alumnos, que tras superar el primer curso, consiguen el Diploma de Especialización en Medicina de Urgencia en Montaña. El segundo incluye exigentes pruebas físicas y prácticas médicas en el San Jorge, en estaciones de esquí y unidades del 061, así como en entornos naturales de escalada, espeleología, barranquismo o esquí para lograr el título que les capacite para un operativo de rescate nacional e internacional. 

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